Operativo coordinado

Policiales | 10 Mar Un hecho prácticamente sin precedentes se registró ayer en una vieja casa de calle paralela a Mongrell entre 25 de Mayo e Ituzaingó, donde se constató el desprendimiento de toda la fachada y el peligro de caer.
Los habitantes de la vivienda hicieron la denuncia ante la Intendencia Departamental, que conjuntamente con los efectivos del Destacamento de Bomberos cortaron la calle, acordonaron la zona y evitaron que el pronosticado derrumbe causara daños personales.
Fue así que en la jornada de ayer desalojaron --con su consentimiento-- a la familia ocupante del lugar, que se trasladó a los fondos de la misma vivienda.
La subcomisaria Ana Laura Helguera, jefa del destacamento local de Bomberos, dijo a EL TELEGRAFO que fue una operación combinada con la Intendencia, y que entre ambas instituciones se hizo el estudio técnico que estableció el riesgo. De los hechos también se informó al Poder Judicial.
Luego que cayó el frente de la casa, los mismos vecinos procedieron a seleccionar los ladrillos que estaban en buena condición para reutilizar en el mismo cerramiento, en caso de ser técnicamente apto.
La Intendencia se encargaría hoy de retirar los escombros que pueden haber quedado en el lugar, por lo que la calle estaría nuevamente habilitada y todo volvería a la tranquilidad habitual de la cuadra.