Paysandú, Martes 20 de Marzo de 2012
Locales | 14 Mar Los integrantes de la Coordinadora de barrios IC se reu nieron con el intendente Bertil Bentos y el encargado de la Unidad de Vivienda de la Intendencia, Nicolás Olivera, puesto que su “mayor preocupación es regularizar la situación de los 13 barrios, de los cuales muchos tienen el 70 u 80 por ciento de la vivienda paga y no pueden acceder a los títulos por problemas que son responsabilidad de la Intendencia”, según dijo a EL TELEGRAFO uno de los integrantes, Ricardo Ambroa.
Excepción por decreto
Señaló que “fuimos con la expectativa que hubiera algún cronograma o algún proyecto de cómo se iban a dividir los barrios, pero nos dijeron que no había nada. Surgieron dos o tres puntos, por ejemplo que la nueva Ley de ordenamiento territorial pide un mínimo de metraje construido y de terreno que es de 200 metros cuadrados, pero la mayoría de las viviendas de los barrios IC tienen entre 90 y 140 metros cuadrados”.
En la reunión se analizaron tres posibilidades para solucionar este problema, que impediría la escrituración de las viviendas. Una de ellas, y aparentemente la más factible, es que se haga un decreto municipal de un artículo solo, que establezca que todos los barrios construidos en terrenos municipales --no solo los IC-- no necesitan ese metraje mínimo. Otra solución sería no aplicar la Ley nueva, porque son viviendas construidas en la década del 70 y 80, con otro marco jurídico, haciendo una excepción. Y la tercera posibilidad, “que es la más engorrosa” dijo Ambroa, sería declarar las viviendas como propiedad horizontal.
Señaló que “lo más rápido, si la Junta lo entiende, sería modificar por la vía de excepción para que las viviendas de los barrios de terrenos municipales puedan ser de menos de 200 metros cuadrados”.
Los costos de escriturar
Por otra parte, se planteó también el costo que tendrían los vecinos para escriturar sus viviendas. “Se había sugerido un convenio entre la Intendencia y la Asociación de Escribanos. Preguntamos en qué favorecía ese convenio a los habitantes de las viviendas, y se nos dijo que en nada, era simplemente de colaboración para alguna documentación o información que daría la Intendencia a los escribanos”. Además, se entendía que el convenio para bajar los costos debería ser suscripto entre los escribanos y la Coordinadora de los barrios.
Buscarán otras vías
Mientras tanto, la coordinadora “se está planteando hablar con los vecinos y ver cómo hacemos, si hacemos un montón de escrituras juntas para abaratar los costos. Pero el convenio de los escribanos con la Intendencia no favorece en nada a los barrios IC, no nos favorece en el costo, es de cooperación entre ellos”.
Ambroa no especificó, pero dijo que iban a buscar otras alternativas porque “si ellos hacen el convenio pero no pueden bajar los costos porque tienen los aranceles de los honorarios, vamos a buscar otra vía”.
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