Primera feria

Locales | 19 Mar Mermeladas y conservas, yogurt, budines, pastas, tartas, pizzas, jugos naturales y verduras como zapallos o boniatos “cosechados en la mañana”, formaron parte de la oferta de la primera exposición y feria de alimentos artesanales elaborados y producidos por participantes del programa “Con los pies en la tierra”, que funciona en la Escuela Granja Melchora Cuenca, ubicada en avenida de las Américas entre Bulevar y Ruta 3.
Allí una veintena de personas de entre 18 y 60 años trabaja cada día en la huerta y la crianza de animales en el marco del proyecto de “Soberanía alimentaria y Horticultura urbana” que se desarrolla a través de un convenio entre el Ministerio de Desarrollo Social, Alur y Ancap.
El coordinador del proyecto, profesor Eduardo Flores, dijo que el concepto de soberanía alimentaria implica el reconocimiento de que “un país no es soberano en la medida que no puede producir los alimentos que consume”. “En países como Uruguay o Argentina se produce mucho más comida de la que consumen sus habitantes pero muchas veces no llega en forma balanceada a los sectores que la necesitan”.
Explicó que el lugar donde se desarrolla este proyecto --la Escuela Granja--, dispone de tierra suficientes para que los participantes tengan un espacio donde producir sus alimentos y enriquecer su dieta, volver a comer verduras y tener una alimentación más equilibrada.
La técnica en trabajo social Valeria Velara, agregó que la tarea del grupo comenzó en noviembre pasado en la huerta, además de participar durante tres días en la semana en talleres de elaboración de alimentos e informática. “Igualmente los participantes se comprometen a turnarse para venir todos los días porque hay que alimentar los pollos, terneros y cerdos”.
Los participantes provienen de distintos barrios de la ciudad, algunos también son alumnos de los cursos de Formación Profesional Básica de UTU que se imparten en el lugar (Granja e Informática). En la tarde funciona allí un Centro Juvenil del Inau. “Organizamos esta feria fundamentalmente para dar a conocer el trabajo que estamos realizando y lo que estamos aprendiendo. Nuestra idea es ser un grupo eficiente en lo productivo y que pueda sustentarse y autogestionase”, dijo Verónica Sosa, una de las participantes, quien explicó que además de plantar verduras han aprendido técnicas de panificación, envasado y conserva de alimentos. “Se ha conformado un grupo muy lindo y nuestra expectativa es seguir trabajando”, agregó.
ORGANOPONIA
Los participantes aguardan que Ancap libere los fondos necesarios para realizar las instalaciones para comenzar a producir en cultivos organopónicos. Se trata de una especie de huerta en la que se siembran y cultivan las plantas sobre un sustrato formado por suelo y materia orgánica mezclados en un contenedor y que se basa en los principios de una agricultura orgánica o natural.
“Se trata de una forma de producción que se utilizó mucho en Cuba en la época de crisis de alimentos. La idea es ser muy eficiente en poco espacio, obtener verdura para consumo y hacer un peso extra con la venta”, agregó Flores.
El cultivo sobre sustratos orgánicos o semiorgánicos gana espacio en la actualidad ante las más diversas razones.
Una de las principales es que la agricultura en las ciudades se ha convertido en una necesidad y cuenta con incalculable potencial para obtener alimentos y otros productos útiles para la salud y la cocina.