PIDE CONTROL DE NORMAS DE CALIDAD

Policiales | 28 Mar La Facultad de Enfermería de la Universidad de la República emitió una resolución sobre el caso de los enfermeros asesinos y su impacto en el ejercicio de la profesión en el país, en la que anuncia que planteará al Ministerio de Salud Pública y la Junta Nacional de Salud (Junasa) que se realice un control permanente del cumplimiento de las normas de calidad para los servicios de cuidados críticos y generales.
Además, la facultad planteará la definición de metas prestacionales que contemplen un medio ambiente de trabajo saludable y seguro para los pacientes y para el equipo de Enfermería, integrando los factores protectores de salud mental. Asimismo, propone la integración de profesionales de enfermería en los comités de bioética y comisiones de seguridad del paciente de las instituciones. También organizará una jornada nacional para el 12 de mayo, Día Internacional de la Enfermería, con actividades que trabajen este tema junto con la opinión pública.
El Consejo de la Facultad de Enfermería informó que analizó “la situación que involucra a dos auxiliares de Enfermería en ejercicio, quienes fueron procesados por delitos cometidos a pacientes internados en las áreas de cuidados críticos” y los informes proporcionados por los integrantes del equipo docente responsable de la formación en bioética de la facultad, así como sus representantes en la Comisión Honoraria Asesora en Medicina Intensiva y la Comisión de Bioética y Calidad del MSP.
En este sentido, consideró que “la complejidad de la situación amerita identificar en primera instancia un problema legal tipificado por la justicia” y que “la información proporcionada por la prensa oral y escrita circulante en los medios, inclusive internacionalmente, ha generado un impacto negativo sobre la imagen del colectivo de Enfermería nacional”.
Agregó que esto último ha traído como consecuencia “un ambiente de conmoción e inseguridad afectando la confianza en la relación enfermero-paciente de manera significativa” y que existen evidencia de las “dificultades que afrontan los servicios asistenciales, por lo que se identifican una multiplicidad de actores intervinientes con distintos niveles de responsabilidad”. La institución formadora de profesionales de Enfermería de nivel universitario planteó como necesario “reflexionar acerca de las múltiples variables que pudieren estar incidiendo en este hecho trágico y su contexto” y señaló que “el Consejo Internacional de Enfermería, máximo órgano internacional a nivel de la profesión, ha demostrado a través de investigaciones clínicas, la relación existente entre la dotación y especialización del personal de Enfermería y la variación de las tasas de iatrogenia (acto médico dañoso) y mortalidad en la población hospitalizada”.
Asimismo, recordó que la Ley de Ejercicio aprobada en 2011 requiere la regulación inmediata y la definición de las competencias para el licenciado y auxiliar de Enfermería en el cuidado directo según niveles de complejidad. La institución reforzó su compromiso en cuanto a “continuar profundizando en la formación de los futuros profesionales universitarios la enseñanza en valores y en el respeto a los derechos humanos fundamentales” y decidió plantear una serie de temas al Ministerio de Salud Pública y la Junasa.
Entre ellos está el control permanente en el cumplimiento de las normas de calidad para los servicios de cuidados críticos y generales; la integración de profesionales de Enfermería en los comités de bioética y comisiones de seguridad del paciente de las instituciones, a los efectos de participar en los dilemas de la práctica clínica, así como en la difusión y la capacitación del personal de Enfermería y, por otra parte, acelerar las acciones que concreten la aprobación del marco regulatorio de la Ley de Ejercicio a nivel gubernamental.
Asimismo, ofreció el aporte de la Facultad de Enfermería para la revisión y seguimiento de estas normas, además de impulsar la definición de metas prestacionales que contemplen un medio ambiente de trabajo saludable y seguro para los pacientes y para el equipo de Enfermería, integrando los factores protectores de la salud mental.