Policiales | 02 Abr La adolescente Daiana Martínez fue encontrada muerta a las 9 de la mañana de ayer, a dos kilómetros de Lorenzo Geyres, donde vivía, con signos de haber sido violada y asfixiada. Fue encontrada por su tío político en Cañada Agesta, conocida como Cañada de Blanc, en el camino que une Lorenzo Geyres con Queguayar y Quebracho. Horas más tarde, la Policía logró la confesión de tres personas, dos mayores y un menor de edad, autores del horrendo crimen, quienes hoy deberán enfrentar a la Justicia.
En tanto, fuentes de la investigación subrayaron que podría haber más involucrados, por lo menos una cuarta persona, extremo que permanece en investigación. El cuerpo de la menor será sometido a autopsia en las primeras horas de hoy, para ser luego entregado a la familia a las 8.30. Será velada en la sala municipal de Lorenzo Geyres. Los mensajes de texto y llamadas telefónicas por celular se consideran clave y podrán arrojar más luz en las próximas horas, ya que la Policía incautó los teléfonos móviles de los dos presuntos homicidas mayores de edad y del menor.
LA DESAPARICIóN
Como se recordará, Daiana Makarena Martínez Taborda, de 13 años, desapareció a las 13 del viernes 30 de marzo, poco antes de ingresar al turno vespertino del Liceo de Lorenzo Geyres, donde cursaba. Había salido de la casa de su abuela, con la que vivía, además de la hermana de su madre y la pareja de ésta. Vestida con el uniforme liceal, llevaba una mochila rosada y gris, pero sin documentos ni dinero en efectivo. Si bien hay versiones un tanto contradictorias, la más firme indica que Daiana llegó a un almacén cercano al liceo --ella vivía seis cuadras del centro educativo-- y habría comprado golosinas. Otra versión, en cambio, indica que llegó hasta la puerta del liceo. Lo que es claro es que no concurrió a estudiar. Desde entonces hasta que se encontró su cuerpo sin vida, se le perdió el rastro. Fueron unas 40 horas de dolor, angustia y terror para la familia. Pero también de búsqueda incansable y sin tregua.
CóMO LA ENCONTRARON
A las 8, tras haber buscado hasta tarde en la noche en el predio ferial y en otras partes de la ciudad, presumiendo que podría haberse trasladado a Paysandú, la búsqueda se reinició al este de Lorenzo Geyres.
Los familiares, así como vecinos de Lorenzo Geyres, criticaron con severidad a la Policía por lo que juzgaron como falta de compromiso con la búsqueda de Daiana. No obstante, se supo que personal policial estuvo realizando averiguaciones en el centro poblado de 600 habitantes. Sin embargo, las tareas de búsqueda y rastrillaje de zona fueron realizadas por familiares y vecinos, auto convocados y organizados.
Por la mañana se inició la búsqueda en unas taperas en las afueras de Lorenzo Geyres, sin obtener resultado. De regreso, con la intención de volver a Paysandú para continuar en la ciudad la búsqueda, se recibió la información de la taxista Patricia Vázquez, quien indicó su extrañeza por una envoltura de (aparentemente) un alfajor, que no había visto previamente. Los familiares se detuvieron en el lugar, a unos cien metros hacia el este del puente de la cañada de Agesta (o de Blanc). Miraron hacia ambos lados y del lado sur apreciaron maleza, por lo que decidieron buscar en esa área.
Ricardo Molina, tío político de Daiana se adentró unos metros. Otros fueron en otras direcciones. No pasó mucho hasta el grito de horror de Molina. Había encontrado el cuerpo. Una bolsa blanca y verde de fertilizante había sido colocada en sus extremidades, y otra similar desde su cabeza y unidas ambas en sus extremos, de manera precaria. Ricardo vio --según contó a EL TELEGRAFO-- que el cuerpo correspondía al de su sobrina aunque no pudo romper las bolsas y comprobarlo. Vio sangre y una bolsa en la cabeza, lo que hace presumir que murió por asfixia.
No pudo más. “Me quedé sin fuerza. No pude ver su rostro, pero sé que es ella. No pude más, fue horrible”, contó. Aún con la fuerte emoción, el pequeño grupo tuvo la fortaleza para preservar lo que quedaba de la escena criminal y abandonaron rápidamente el campo. La noticia corrió rápido en Lorenzo Geyres, pero ellos mismos pidieron a los vecinos que iban llegando que no ingresaran al campo; por el bien de la investigación.
TENSAS HORAS DE ESPERA
Unas 80 personas se reunieron en la zona. No les importaba el inclemente sol, estaban demasiado conmocionados por la noticia. Divididos en varios grupos, por familia, amistad, compañeros del liceo, vecinos, comentaban sin salir de su asombro lo ocurrido. En su impotencia culpaban a la Policía por no actuar con diligencia. Desde todos los grupos, el clamor era el mismo: ¿por qué la Policía no había actuado rápidamente? ¿Por qué fueron los vecinos los que tuvieron que organizarse? Incluso planeaban hacer un corte en Ruta 3 en horas de la mañana de ayer, pero la realidad pudo más y sumió al pueblo en desesperación y dolor.
El primer móvil en llegar al lugar fue el de la Seccional Sexta de Quebracho, de la que depende la subcomisaría de Lorenzo Geyres. Posteriormente se hicieron presentes el jefe de Policía, inspector mayor (r) Roque Arámbula, el subjefe de Policía, comisario inspector Héctor Muñoz, el director de Seguridad, comisario inspector Néstor López y el director de Coordinación Ejecutiva comisario inspector Humberto Cardozo. También arribaron la jueza y la forense. A las 12.45 arribó al lugar personal de Policía Técnica y a las 13.20, entre las lágrimas de los vecinos, el cuerpo de Daiana fue retirado, con dirección a la morgue del Hospital Escuela del Litoral. Se presumía entonces que la autopsia se iba a realizar de inmediato, pero la forense Rosa López estaba de guardia en Comepa, por lo que la necropsia se realizará en las primeras horas de hoy.
CAPTURAN A LOS
PRESUNTOS AUTORES
Si bien los residentes de Lorenzo Geyres retornaron a su centro poblado, con la cabeza gacha, lágrimas en los ojos y rabia en el corazón, estaban sedientos de justicia. La Policía tampoco quería dejar que las horas corrieran. Detuvieron en averiguaciones a tres personas: al “Mister”, un trabajador forestal; a otro trabajador forestal y a un menor de edad, el “Gordo”. Los pobladores coincidían con los investigadores. Pensaban que eran ellos, pero no se explicaban por qué no había sido también detenida una cuarta persona.
De todas maneras, los tres habrían aceptado su participación en la violación seguida de homicidio. Aunque los detalles aún no se han filtrado y se mantienen en estricta reserva para no entorpecer la labor de la Justicia Penal, que se iniciará hoy.
OTROS DETALLES Y DIFERENTES VERSIONES
Si bien los investigadores se rehusaron a confirmar o negar informaciones en poder de EL TELEGRAFO, los vecinos y algunos familiares brindaron diferentes detalles.
Lo más extraño es que señalaron que tanto el “Gordo” como el “Mister” estaban en la escena del crimen, mezclados con los compungidos pobladores. En la tarde de ayer, vecinos tuvieron la intención de incendiar la casa del “Gordo”, que vive con su madre y hermanas.
Por otro lado, llama la atención cómo atrajeron a Daiana. Una posibilidad es a través de un mensaje de texto del “Gordo”, que es hermano de una compañera de clase de Daiana. Invocando a su hermana, podría haberla hecho ir a determinado lugar.
Los vecinos hablan de una violación a otra joven, ocurrida poco tiempo atrás, en la que habrían estado involucrados dos de los tres hoy detenidos, uno de ellos agravada su participación por grado de parentesco.
MUCHAS DUDAS
POR RESOLVER
Quedan todavía muchas interrogantes. Daiana era una “adolescente ejemplar”, como la calificaron muchos vecinos. La recordaron como “una chica reservada, amable, que parecía feliz y que era de su casa”.
Ricardo Molina confirma eso. “El viernes a mediodía estuvimos almorzando. Ella estaba feliz porque tenía que hacer unos dibujos de las diferentes estaciones (climáticas). Estaba feliz. Y así se despidió y se fue al liceo. Nada raro, y tampoco llevó plata ni documentos. Era una chica querida por todos, de la casa”.
Por eso precisamente en Lorenzo Geyres las preguntas no cesan y las respuestas no se encuentran, aunque eso será tarea de la Justicia. No se entiende la conexión, la manera en que Daiana en pocos minutos cambió de planes y en lugar de concurrir al liceo, como todos los días, fue a otro lugar.
No se sabe aún dónde estuvo retenida, ni lo que realmente le hicieron. La autopsia revelará hoy la hora y circunstancias de su muerte. También si fue asesinada en el lugar donde fue encontrada, aunque hay indicios firmes que fue “plantada” en el lugar en la mañana de ayer, pues ese espacio ya había sido revisado por vecinos. En Lorenzo Geyres todo se sienten familiares de Daiana; todos sienten el mismo dolor y la misma bronca. Fue muerta una adolescente que solo se preocupaba por sus estudios y su familia. El pueblo pide Justicia, pero no parece interesado en otorgar perdón.