Equipo móvil de control

Locales | 29 Mar Un escáner móvil de última generación, importado de Estados Unidos con un costo de 230.000 dólares, fue estrenado ayer en el puente internacional general Artigas por funcionarios de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) y estará trabajando aquí durante algunos días.
Coincidiendo con el nombramiento del nuevo administrador departamental de la DNA, César Eduardo Carballo --que asumió el lunes 26-- la Dirección Nacional dispuso que el “bautismo” de la nueva herramienta aduanera fuera en Paysandú.
Se trata de un equipo de rayos X General Electric con controles digitales y utiliza el sistema Morpho detection, todo lo cual está montado sobre una camioneta Ford E450 Super Duty. El equipamiento es similar al de los demás escáneres que tiene la DNA en otros puntos de frontera y en algunos aeropuertos, y también al que está instalado en forma permanente en el puente General Artigas, pero que pertenece a la Aduana argentina.
En colores
Según pudo constatar EL TELEGRAFO cuando el equipo estaba trabajando ayer en el puente Paysandú-Colón, se ingresan los bolsos por uno de los lados de la caja de la camioneta que contiene el escáner. En la parte trasera de la caja del vehículo hay un habitáculo con dos pantallas de 29 pulgadas, donde aparece la imagen de lo que hay en el interior de, por ejemplo, un bolso. En una pantalla aparece en blanco y negro, con relativamente buena definición, y en la otra la imagen está en colores. Este punto es vital para el trabajo, porque el escáner tiene una gama de colores basados en el número atómico del producto que se trate y asigna colores según su densidad. Por ejemplo, la madera y el aceite pueden ser naranja o marrón, mientras que un inorgánico alto, como vidrio o cristal van en verde o amarillo.
Esos seis colores que muestra el escáner según la densidad de los materiales identifican qué puede ser lo que se está viendo. Si es orgánico aparecen diferentes colores según lo que se trate, al extremo de diferenciar, por ejemplo, si un paquete de cigarrillos contiene tabaco o algún otro elemento. Esto permite también, por ejemplo, saber si un producto es cocaína o heroína.
Si no es orgánico, la máquina muestra si es metal, plástico o tela, y hasta qué elementos lo integran, viéndose el “interior” del producto. De esta manera se pueden reconocer diferentes explosivos, o pólvora. Lo único que no permite ver su interior es una cobertura de plomo, pero en ese caso se abre el recipiente para ver lo que contiene.
A modo de ejemplo, se indicó que el escáner que está instalado en el puerto de Montevideo es volumétrico y “muestra” el interior, pero solamente con detalles de la forma de lo que contiene.
Por las rutas
Si bien el equipo fue estrenado en el puente, la intención de la Dirección de Aduanas es trabajar también en las rutas, interceptando y revisando el equipaje y las encomiendas que van en los ómnibus, por ejemplo.
Para ello, el móvil --que además es acompañado por al menos una camioneta más con los funcionarios- cuenta con un equipo electrógeno de 220 voltios. De esta manera, el escáner puede funcionar en cualquier lugar donde se instale.
De hecho, ayer se revisaron entre la mañana y la tardecita 118 bolsos y equipajes, casi todos de pasajeros de los servicios de transporte que cruzan el puente.
Según se indicó, los funcionarios de Aduanas pueden intervenir y revisar cualquier vehículo o persona que se traslade en el territorio nacional. La única limitación es con respecto a las encomiendas, que no pueden ser abiertas en el camino. Sin embargo, legalmente está previsto que si hay alguna caja que pueda contener algo sospechoso, se espera a que vayan a retirarla y se solicita a quien la recibió que la abra.
Sin riesgos
La radiación que emite el escáner es muy baja, solamente en momentos en que está “escaneando” y básicamente solo dentro de la “caja” donde pasan los bolsos o paquetes. De todas maneras, tiene un sistema de aislación entre el equipo y el o los hombres que lo estén operando, y la única recomendación es no ingresar ninguna parte del cuerpo cuando el aparato está encendido.
Si por alguna razón ingresara alguien en el espacio de los rayos X, hay controles que una vez accionados detienen toda la descarga radiactiva que pueda haber.