Locales | 19 Abr La Dirección Nacional de Aduanas está aplicando al pie de la letra la ley respecto a las restricciones de ingreso de mercaderías desde países vecinos, pero también en lo que hace a las mercaderías compradas en los comercios libres de impuestos o free shops, cuando no se cumplen los requisitos de turista. Fuentes vinculadas a la represión del contrabando confirmaron a EL TELEGRAFO que ya comenzó la incautación de productos comprados en el free shop de Paysandú por ciudadanos que no tienen salida del país, y que habitualmente estacionan sus vehículos en el cantero central de Avenida de las Américas, a pocos metros del ingreso al puente.
“Pararon a varias personas que entraron y salieron caminando, y sobre todo sacaron cigarrillos y whisky”, dijo un funcionario del paso de frontera que observó de proceder el los aduaneros ayer.
Mas de 24 horas
De acuerdo a las consultas efectuadas por EL TELEGRAFO, solamente se autorizará compras de uruguayos en el free shop cuando éstos puedan comprobar que estuvieron más de 24 horas fuera del país y una sola vez al mes. Nuestras fuentes dijeron que para estos casos hay una franquicia legal de 150 dólares mensuales para ingresar mercadería, y esa suma trepa a los 500 dólares cuando se trata de compras en el free shop, y se incluyen cuatro cartones de cigarrillos y cuatro botellas de whisky.
Sin embargo, no es legalmente admisible la compra de productos en un free shop para ciudadanos que no cumplan ese requisito, por lo que la resolución de Aduanas es decomisar todo producto que salga irregularmente del free shop. Además, los responsables del comercio libre de impuestos deben exigir a sus clientes uruguayos el comprobante que estuvieron fuera del país durante 24 horas para esas compras. De otra manera, también incumplen la normativa. La compra en el free shop, algo bastante común en Paysandú y en otros lugares donde están estas tiendas, “es una defraudación igual que traer cosas del otro lado de la frontera”, explicaron los consultados.
Advierten sobre prohibición
Mientras tanto, quienes ingresan a Uruguay pueden ver grandes carteles donde se advierte de la reglamentación vigente en cuanto a la introducción de mercaderías al país. Dos grandes superficies contienen las especificaciones escritas con marcadores sobre papel, donde se puede leer la disposición de la Aduana en cuanto al tráfico vecinal, estableciendo que “según el artículo 131 de la ley 15.691 se autoriza el ingreso de cinco kilogramos de bienes comestibles sólidos por persona y por semana, excepto aquellos que se encuentren impedidos por disposiciones sanitarias u otras normas prohibitivas”. Se aclara además, en letras rojas, que “sábados, domingos y feriados no se autoriza el ingreso de mercaderías por este régimen”.