Policiales | 22 Abr El propietario de un horno de ladrillos de la zona de paraje Cangüé fue víctima de un violento ataque y hurto, pues no conformes con darle una golpiza, tres desconocidos le robaron sus ahorros y huyeron en su camioneta en dirección a Paysandú.
Según pudo saber extraoficialmente EL TELEGRAFO --en esferas policiales no fue proporcionada información al respecto--, el hombre, de 50 años, vive solo en su predio, pues sus padres fallecieron hace un tiempo. Al culminar sus actividades diarias, salió de la finca a fin de retirar una toalla del tendedero pues iba a tomar un baño y percibió ruidos extraños provenientes de un paraíso. Al levantar la vista para ver de qué se trataba, sobre él se arrojó un sujeto encapuchado que comenzó a golpearlo sin piedad. Aparecieron entonces otros dos individuos, también con sus cabezas cubiertas, los que se sumaron a la golpiza. En cierto momento, uno de ellos colocó un arma de fuego sobre la cabeza de la víctima y le exigió que entregara el dinero, a lo que el hombre se negó en primera instancia. Ante la insistencia de los delincuentes, temió por su vida y no tuvo más remedio que indicarles el camino hacia el lugar donde tenía enterrado un frasco conteniendo una fuerte suma de dinero en pesos.
Una vez con el dinero en mano, los sujetos dejaron a su suerte a la víctima y, no conformes con el botín, le robaron su camioneta para trasladarse a la ciudad. Con una costilla quebrada y varios golpes en el cuerpo, el ladrillero fue auxiliado y conducido para su asistencia médica, tras lo cual fue dado de alta porque pese a todo sus lesiones no revestían gravedad. Horas después, el vehículo marca Chaná fue encontrado en Proyectada 52 y Enrique Chaplin.