Opinion | 27 Abr Hoy se inauguran en Paysandú dos obras que han demandado al menos unos 18 millones de dólares, en la zona de Guichón. Se trata del vivero forestal Santana de UPM Forestal Oriental y de la recuperación de un tramo de unos 14 kilómetros de Ruta 4, que precisamente lleva al vivero y fue uno de los requerimientos de la empresa finlandesa para instalarse en el área.
Toda inversión es siempre bienvenida, porque genera empleo, lo que trae aparejado el bienestar de toda la zona, en la medida que no solamente se benefician quienes obtienen empleos directos, sino quienes brindan toda clase de productos y servicios. Si hay trabajo hay dinero y esto lleva al consumo, para satisfacer las necesidades básicas y también las suntuosas, además claro de los propios requerimientos secundarios de la empresa. Toda inversión es removedora y transformadora, pero muy especialmente cuando ello ocurre en pequeñas comunidades. Y aunque Guichón es la segunda comunidad del departamento, sigue siendo una pequeña ciudad, hoy beneficiada con este emprendimiento.
En cuanto a las obras en sí mismas, sin dudas, Paysandú es nuevamente receptor de una notable inversión en el área forestal, que vuelve a determinar la confianza de los empresarios en el departamento, toda vez que puede ofrecer no solamente mano de obra calificada o que puede ser capacitada sin demasiado esfuerzo, sino que además tiene una gran oferta en lo que refiere a servicios que son necesarios para las empresas.
Un vivero que toma las más modernas tecnologías, lo que incluye no solamente un aumento en la productividad sino también un uso cauteloso de los recursos en beneficio del medio ambiente, ciertamente es una inversión inteligente, en la medida que no habrá dividendos si no hay respeto por el planeta. Por otro lado, las obras que hoy se inauguran también destacan las posibilidades para encarar emprendimientos de mayor porte por parte de la Intendencia de Paysandú, en la medida que con su personal, con el aporte del Ministerio de Transporte y Obras Públicas y de la propia UPM Forestal Oriental, ha podido llevar adelante una obra vial que no está dentro de sus trabajos habituales, en la medida que se trata de un tendido nacional. Aunque al inaugurarse hoy faltan detalles como la señalización, no quedan dudas que el trabajo cumplido por los funcionarios municipales ha resultado satisfactorio.
Finalmente, este tipo de obras que reúne esfuerzos privados con públicos, demuestra la imprescindible colaboración que debe existir entre las inversiones empresariales con el acompañamiento del Estado. Y el caso de mejorar la ruta es claramente uno principal, que además no solamente beneficiará al vivero sino a todos los productores de la zona, que podrán sacar sus productos con menor desgaste de sus vehículos.