Nacionales | 27 Abr Unos 851 reclusos de los módulos 4 y 5 del Comcar fueron realojados ayer en otras cárceles, tras el motín del día anterior, informó El País Digital. Sin embargo, los 300 restantes volvieron a pasar la noche en el patio del módulo 8 del centro. Debido a esto, las autoridades dispusieron la entrega de frazadas, que según los familiares de los reclusos alcanzaron para todos.
Más temprano autoridades carcelarias entregaron en la puerta del Comcar un listado con el nombre y destino de los reclusos trasladados, lo que trajo tranquilidad al grupo de familiares apostados frente al penal. A su vez, sobre el mediodía el Ministerio del Interior informó que se restablecieron las visitas en el complejo carcelario ubicado en Santiago Vázquez y sobre las 15:30 las puertas de acceso se abrieron y las familias presentes formaron una cola para entrar, como se realiza en un día de visitas habitual.
Finalmente la guardia penitenciaria anunció que se iban a permitir las visitas para los módulos 1, 2, 6, 7 y 9, por lo que los presos que se amotinaron no recibirían ni visitas ni paquetes. Esto una fuerte protesta entre las personas que esperaban para ingresar a la cárcel, y la Policía tuvo que despejar del ingreso a parte de los familiares. Mientras las familias de los reclusos de los otros módulos ingresaban al penal, el resto las insultaron, gritándoles “bagayo”, publicó El País en su sitio web.
Por otra parte, las autoridades carcelarias finalizaron ayer con la primera parte del traslado de 1.160 presos que participaron en el motín en el Comcar. Fuentes del Ministerio del Interior confirmaron a El País Digital que 200 presos fueron enviados al Penal de Libertad, 50 a La Tablada y 50 a Punta de Rieles.
No obstante, aún hay 860 presos que esperan por un lugar. Algunos quedarán alojados en otros módulos del Comcar, mientras que podría haber más traslados a cárceles del área metropolitana, agregó la fuente consultada.
Para determinar el centro carcelario al que serían enviados los reclusos, se les realizó un perfil. Según informó el medio, hoy se continuaría con dicha tarea y se realojaría a más presos.
En otro orden, una inspección primaria de los arquitectos del Ministerio del Interior arrojó que el costo de refaccionar los módulos 4 y 5, que quedaron prácticamente destruidos durante los incidentes, oscilaría entre los seis y los ocho millones de dólares. Esta cifra estimativa surge luego de calcular los costos de obras de refacción que se realizan en el módulo 3, pero que son de menor tamaño. No obstante, la fuente afirmó que este es un costo muy primario y que podría bajar una vez se realicen futuras inspecciones en mayor detalle.