Paysandú, Domingo 06 de Mayo de 2012
Rurales | 06 May Datos estadísticos del Instituto Nacional de Carnes (INAC), establecen que Estados Unidos continúa liderando las importaciones de carne bovina, desosada y madurada entre los mercados del Nafta, con una demanda que creció 29,2%.
Si bien Uruguay tiene menos carne para exportar, se beneficia de los valores internacionales. La tonelada de carne vacuna uruguaya sigue valorizándose y según los negocios concertados hasta el pasado 27 de abril, el precio creció 1,2%, llegando a U$S 3.865 (a igual fecha del año 2011 se pagaba U$S 3.817).
En tanto, la faena cayó 6,35% entre las mismas fechas de la comparación. La industria lleva procesados 617.051 cabezas frente a las 658.945 que se mataron en 2011 (siempre entre las fechas de la comparación anterior). Este será el año con la menor faena de la historia, pues están faltando los novillos que la sequía de 2008/09 le quitó a la ganadería uruguaya.
A nivel de mercados, también siguió creciendo la demanda de Canadá (6,7%). Este destino importó 5.501 toneladas peso canal (producto cárnico primario). Mientras tanto, México compró apenas 4 toneladas y son los primeros negocios que se hacen este año.
A nivel de la Unión Europea --un destino fundamental para la industria uruguaya, porque van los cortes de mayor valor de la res (lomos, bifes y cuadril)--, la demanda no fue tan significativa, porque bajó 12%. Se embarcaron con este destino 16.379 toneladas hasta abril de 2012, cuando a igual fecha de 2011 se habían enviado 18.615 toneladas.
Israel es uno de los mercados que ha tenido un firme crecimiento en la importación de carne bovina, básicamente delanteros. La demanda subió 67% y significó el embarque de 14.835 toneladas frente a las 8.883 toneladas del año pasado.
A nivel del Mercosur también creció la demanda de carne bovina uruguaya (11,3%) en lo que va del año.
En la región el mayor crecimiento en la importación está dado por Chile (28,7%), un mercado que demanda calidad y cortes de animales jóvenes.
Los chilenos importaron 7.050 toneladas --siempre hasta el pasado 27 de abril-- frente a las 5.477 toneladas registradas por el INAC a igual fecha del año anterior.
En el caso de Brasil se importó menos carne. Las compras cayeron 13% al llevarse 3.529 toneladas en lo que va del año. A este mercado también van algunos cortes de alto valor como las picanhas (tapas de cuadril) y cuadriles enteros. En tanto, no es menor el crecimiento en las compras desde Argentina. En este caso mayoritariamente los envíos son asados. La demanda subió 26,1%. Fueron 347 toneladas frente a 275 toneladas registradas el año pasado a esta altura del año.
Venezuela también está comprando más carne bovina uruguaya. La demanda subió 29,5% --según los datos estadísticos del Instituto Nacional de Carnes-- y el mercado se llevó 6.582 toneladas carcasa, cuando el año pasado había adquirido 5.080 toneladas.
Los importadores de China también subieron sus compras; el alza fue de 8,32%. Este es un mercado muy importante para la industria uruguaya porque es un fuerte importador de menudencias bovinas, principalmente de los productos del estómago del vacuno (mondongos y librillo), pero también de otros órganos que no tienen otros compradores. También llevan cortes de carne y en este destino Uruguay está autorizado para entrar con hueso.
Para los frigoríficos uruguayos es un mercado que a futuro incrementará más la demanda de carne vacuna y menudencias.
Novillo tipo
Reflejando la valorización de la tonelada de carne bovina uruguaya, el novillo tipo que calcula el INAC, a marzo, subió 1,8% y llegó a US$ 1.212 por cabeza.
En el análisis por componentes continúa la baja del cuero, se dan valores estables para las menudencias y subproductos y para los cortes de carne en la exportación. La canal al mercado interno presentó un incremento importante, según los datos del INAC.
El INAC presume que se haya alcanzado un cierto “escalón” o meseta en el valor del Novillo tipo. Según la visión del organismo, para la superación del valor deberán mejorar las condiciones de la demanda en los mercados mundiales, particularmente en la Unión Europea y los Estados Unidos.
Esto no sólo tiene efectos directos en esos mercados sino indirectos en otros mercados relevantes para el Uruguay como la Federación Rusa, Israel o China, según establece el INAC.
Alta calidad
Por más que la Comisión Europea negó esta semana la posibilidad de imponer cualquier restricción a las importaciones de carne bovina de Estados Unidos, luego de la confirmación del cuarto caso de “vaca loca” en ese país, Uruguay podría llegar a aprovechar cualquier brecha en el mercado y colocar más cortes de alto valor en el marco de la cuota cárnica de alta calidad de la Unión Europea o Cupo 620. Solo cinco países pueden acceder a este cupo --Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Estados Unidos y Uruguay-- en el marco de un cupo que creció a 45.000 toneladas.
Entre los habilitados, Estados Unidos es un fuerte competidor de las carnes uruguayas.
“Estados Unidos tendrá dificultades para colocar su carne --hay mercados como los asiáticos que ya decidieron cerrarle el ingreso-- y Uruguay puede beneficiarse al ocupar algunos espacios de mercado que puedan quedar en el marco del Cupo 620”, consideró el vicepresidente del Instituto Nacional de Carnes, Fernando Pérez Abella, al ser consultado por El País.
La industria frigorífica exportadora había manifestado que el nuevo caso de “vaca loca” --no había un caso desde 2006-- complicaría más el mercado estadounidense, donde se registra una retracción en la demanda de hamburguesas.
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