Paysandú, Martes 05 de Junio de 2012
Nacionales | 05 Jun Chau Antonio Banderas
La regulación de contenidos a través de una nueva ley de medios es uno de los temas que últimamente ha generado enfrentamientos. En este sentido, la semana pasada el presidente José Mujica dijo que no va a ser una “mordaza”, aunque admitió que fijará “obligaciones y responsabilidades”.
La senadora Lucía Topolansky estuvo de acuerdo con él. Tras asegurar que es una “férrea defensora” de la “libertad de expresión”, manifestó que quiere “equilibrar” con la ley “el otro lado de la balanza” que es “el de la responsabilidad”. Para explicar mejor su punto, expresó que se deberían discutir incluso qué películas y qué novelas difunden los canales de televisión.
“Una preocupación que tengo: se nos están muriendo un montón de botijas o quedando parapléjicos o lisiados por las picadas. Cuando un chiquilín ve en la televisión alguien que salta con una moto desde un segundo piso y se llama Antonio Banderas, pasa por arriba de un camión, y esto y lo otro y siempre está vivo, quiere imitarlo. Entonces me pregunto qué tanto estamos educando”, dijo Topolansky a El Observador. Otro ejemplo que le pareció acorde fue el de la adolescente asesinada por celos en Las Piedras. “Algún tipo de novela se basa sólo en celos extremos, donde hay homicidios… esto me lo pregunté cuando mataron y desfiguraron a la muchacha de Las Piedras. ¿Qué tanto ese tipo de cosas que a diario nos propinan desde la pantalla no está incidiendo positivamente en la cabecita de algunas personas? Porque si no, no tienen mucha explicación algunas cosas”, añadió.
Policiales
El palo también fue para las noticias policiales que emiten los informativos. “Me llama la atención que cuando no hay un accidente o un homicidio uruguayo se baje uno de TN o incluso he visto bajar de la televisión norteamericana. Entonces evidentemente hay quien debe creer que tiene que haber una dosis. Yo no me explico cuál es la función”, dijo Topolansky a El Observador.
“Así como se predica sesenta veces pasar el homicidio del trabajador de La Pasiva, hagamos un esfuerzo de pasar algo constructivo las mismas veces a ver qué efecto tenemos”, dijo la legisladora. “Esto se lograría a través de una medida (dentro de ley de medios) que bogue por la responsabilidad”, dijo Topolansky. Eso puede implicar, por ejemplo, que tengan espacios educativos.
Consultada sobre si esto se daría a través de un pedido, respondió: “No no, esto es lo que yo le digo del otro platillo de la balanza. Responsabilidad total. Esto yo no se lo preciso explicar a nadie. Somos todos adultos”.
Tire y afloje
Poco duró el mensaje de las campañas a la Presidencia del Frente Amplio: “El Frente unido”. Con las remociones sorpresivas de distintos jerarcas, el malestar llegó incluso a los miembros del oficialismo. Luego de que el jueves pasado el senador Rafael Michelini twitteara: “sacar a Lescano es inexplicable e inentendible, de insistir en este camino errático, el presidente fagocitará su mayoría parlamentaria”, la bataola se le vino encima.
Por eso, el senador de Alianza Progresista, Rodolfo Nin Novoa, intentó bajar los decibeles del enfrentamiento e indicó que “nadie va a ser tan irresponsable de romper la mayoría parlamentaria que tiene el gobierno”. Lo de Michelini “no fue una amenaza”, aclaró. El tema es que “el día que falte un senador nuestro, el empate 15 a 15 va a ser negativo. Y esas cosas hay que cuidarlas. La advertencia, la reflexión de Rafael es una reflexión válida”, manifestó. “A algunos les puede caer mejor y a otros peor, sobre todo porque hay anuncios de más remociones”, indicó a El Espectador.
Por otra parte, Esteban Valenti también se puso en el ojo de la tormenta, y logró disgustar a más de uno. En respuesta a sus declaraciones realizadas la semana pasada, el diputado Aníbal Pereyra dijo a Teledía que “tenemos que escuchar más a los frenteamplistas y menos a (Esteban) Valenti, que lo único que le preocupa es dar manija contra el presidente; no sé si está jugando el papel de publicista o de político”.
El duende que chifla
Por otra parte, en el acto de despedida al ex ministro Héctor Lescano, el presidente Mujica habló de un “duende” que está filtrando información desde el Gobierno, lo que fue confirmado luego por el diputado Aníbal Pereyra. “Lo que generó más preocupación es que del entorno del presidente salió la información a la prensa”, dijo. “Estas cosas son delicadas, lo dijo el presidente cuando se refirió a los duendes”, agregó. Sin embargo, dijo que más que un duende, “es un traidor”, que “con dosis de maldad, está mirando su interés personal y no el colectivo”. Desde la oposición, también se cree que este es un tema delicado. El diputado del Partido Nacional, José Carlos Cardoso, dijo a Montevideo Portal: “si el gobierno tiene desconfianza de jerarcas o gente cercana al gobierno, es una intriga palaciega. Hablamos de alguien que pasa información y que tiene como objetivo dañar a otros. Eso se tiene que resolver y volver a la tranquilidad que se precisa para gobernar. Más allá de toda broma, es malo tener desconfianza en el gobierno”. Según Cardoso, “eso genera una desconfianza en cualquier equipo. Es un veneno en cualquier equipo de trabajo. Tanto en política, en fútbol o en periodismo. Los que están afuera lo ven como una cosa que daña y un tironeo innecesario”.
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