Nacionales | 15 Jun El reintegro a trabajadores y pasivos que hicieron aportes en exceso al Fonasa en 2011 sumará unos 38 millones de dólares, estima el Ministerio de Economía y Finanzas. En tanto, el costo fiscal anual de incorporar pasivos al sistema de salud trepará en 2016 a 270 millones de dólares. Los datos fueron proporcionados en la Comisión de Hacienda de Diputados por el representante del Ministerio de Economía en la Junta Nacional de Salud, Martín Vallcorba. Cada activo o pasivo que integra el Fondo Nacional de Salud (Fonasa) aporta el 4,5% de su salario si no tiene menores ni cónyuge a cargo y 6% si los tiene. Ese monto tiene que alcanzar para pagar el costo promedio que las mutualistas le cobran al Estado por el servicio y un 25% adicional que es considerado aporte “solidario”. En caso de que lo retenido para Fonasa sea superior, el Banco de Previsión Social deberá devolverle la diferencia. Por eso, unos 40.000 trabajadores independientes debieron presentar declaración jurada en BPS (como profesionales universitarios y titulares de servicios personales no amparados por caja profesional). A algunos de ellos les corresponderá devolución, al igual que ocurrirá con los dependientes que aportaron en exceso. Los datos aún no fueron procesados, pero Economía maneja una estimación en base al procesamiento de microdatos de la Encuesta Continua de Hogares. Vallcorba señaló que eso arroja “un margen de error importante”, pero que se trata de “una primera estimación” con la que se está trabajando, que “indicaría un costo del entorno de los $ 750 millones a $ 800 millones, o sea, aproximadamente 37 ó 38 millones de dólares”.
El plazo que tiene el Estado para pagar ese reintegro es el 31 de diciembre y el presidente del Banco de Previsión Social, anunció en abril que se hará el segundo semestre, “una vez que lo disponga el Poder Ejecutivo”.