Rurales | 15 Jun Los principales acontecimientos de la rica historia de 40 años consecutivos de Buiatría en Paysandú fueron recordados por el doctor Juan Franco en el acto inaugural. “Para las nuevas generaciones es muy difícil comprender la importancia que reviste este aniversario, pues sólo la conciencia del paso del tiempo puede aquilatarlo en toda su dimensión”.
“Cuando además esa actividad es un congreso internacional de una disciplina dentro de las ciencias veterinarias, se torna más difícil de entender aún”, indicó.
Recordó que “allá por el año 1955, la novel Sociedad de Buiatría del Uruguay, en el viejo local de la Agrupación Universitaria, organiza el primer Congreso de Veterinaria. Años después, intentando reunir la profesión en el Interior, se realizaron las Primeras Jornadas Veterinarias en la ciudad de Tacuarembó, en el año 1971”.
En ese momento, las sociedades de buiatría habían empezado a formarse en Francia, Italia y Alemania. En nuestra región, “debemos destacar el impulso que significaron los cursos de Cirugía de la Facultad de Veterinaria de La Plata, organizados por el doctor Pablo Vidella y a los cuales concurrían jóvenes colegas de países vecinos, contando entre otros con docentes de nuestro país, como el doctor Luis Queirolo”.
Surgió así, en el seno de la Sociedad de Buiatría del Uruguay, la necesidad de organizar un Congreso de Buiatría. Sin el rótulo de “congreso” y con el título de “jornadas”, se emitió la resolución. “En ese entonces, el doctor Recaredo Ugarte, cumpliendo un rol protagónico, asume el compromiso de la organización, proponiendo a Paysandú como sede para la organización del evento”.
Fue así que en el galpón de una automotora, en abril de 1973, tuvieron lugar las primeras Jornadas Uruguayas de Buiatría, con tres días de duración, más de 150 inscriptos y los doce socios que tenía el CMVP con la responsabilidad de su organización.
En 1974, las Segundas Jornadas de Buiatría fueron ya las primeras latinoamericanas, distinción que ameritó un cambio de local para recibir a 300 colegas. Al finalizar el evento, por primera vez en un Congreso de este tipo, se entregaron a los participantes los resúmenes, material que se fue realizando simultáneamente con el desarrollo del evento.
Para el año 1977, su resonancia trascendió lo regional y Europa se hizo presente con el doctor Jacques Espinasse como disertante.
En 1978 Estados Unidos participó con la destacada presencia del doctor Kenneth McEntee.
La proyección internacional de los disertantes, el lugar y fecha que quedaron pautados en el calendario de la Sociedad Mundial de Buiatría, sumado a la concurrencia que año a año iba incrementándose, marcaba un pasaje de grado. Se trataba del único foro para el que en años de dictadura no se tenía que pedir permiso, curso de educación permanente de revisiones o puesta al día de los más variados temas dentro de la disciplina, expuestos por los más encumbrados investigadores de Latinoamérica.
No es de extrañar entonces que, después de esta trayectoria, se lograra la organización de un Congreso Mundial de Buiatría, que vio la luz en Punta del Este, en la bisagra de 2 siglos, en diciembre del año 2000, compartiendo el escenario organizativo con el Centro Médico Veterinario de Maldonado.
“Este Congreso marcó también una necesaria profesionalización de parte de la organización”, dijo, “ya que las urgencias actuales no son las mismas de hace cuatro décadas. Quizás lo más importante a destacar de todo esto ha sido la responsabilidad y el compromiso con la profesión de las nuevas generaciones, que siguen llevando adelante el desafío, permitiéndonos hoy compartir estas jornadas en Paysandú”.
“Debemos mencionar además, en estos 40 años de trabajo, nuestro agradecimiento al apoyo que hemos recibido año a año de todas las firmas comerciales y de instituciones públicas y privadas, tanto a nivel nacional como departamental, aún en condiciones de crisis como en el año 2001, de las cuales esta organización no estuvo ajena”, finalizó Franco.