Nacionales | 22 Jun Cinco dirigentes de Fenapes comenzaron ayer una huelga de hambre, lo que se inscribe dentro de las medidas impulsadas por el sindicato de docentes de Secundaria, para reclamar más recursos para la educación. Según publicó Montevideo Portal, la huelga durará por lo menos hasta el 27, cuando se cumplirá una asamblea del sindicato. Marcel Slamovitz, uno de los huelguistas, manifestó que se busca “sensibilizar a la población” y aclaró que serán sometidos a controles de presión arterial y electrocardiogramas.
Slamovitz dijo que los docentes realizarán toda la huelga en el local de la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP), ubicado en la calle Fernández Crespo, en Montevideo. Allí recibirán asistencia médica de dirigentes de la FFSP. Entre los cuidados, se controlará la presión arterial y se realizarán electrocardiogramas a los huelguistas para monitorear su estado de salud.
El huelguista admitió que esta es “una medida fuerte”. Sin embargo, relativizó su importancia frente a otras medidas como los paros regionales de 24 horas y las ocupaciones de liceos que comenzaron ayer en Salto y Tacuarembó. Asimismo, señaló que la huelga de hambre es “una medida histórica del movimiento sindical”, a la que los docentes decidieron recurrir ante el incumplimiento de sus reclamos.
Slamovitz hizo hincapié en que la medida “busca sensibilizar a la opinión pública y no al poder, porque al poder no lo sensibiliza nadie”. También afirmó que la mayoría de los alumnos y sus padres apoyan estas movilizaciones.
Por otra parte, expresó que, según lo decidido por la última Asamblea Nacional de Fenapes, la huelga de hambre “no tiene una fecha de finalización concreta”, por lo que continuará hasta que haya avances concretos en la negociación con el Poder Ejecutivo. “Acá no es solo lo salarial, porque si no se crean nuevos cargos y se mejoran las condiciones edilicias no se va a levantar la medida”, señaló al respecto.
Por ahora se prevé que la huelga de hambre continúe hasta el próximo miércoles 27 de junio, día en el que se llevará a cabo una nueva asamblea de Fenapes. “Los compañeros tendrán que decidir cómo sigue, de acuerdo a los avances que haya”, indicó.
Aunque los docentes no tuvieron contactos formales con representantes del Ejecutivo luego de anunciadas las medidas, Slamovitz afirmó que la huelga ya “tuvo las primeras repercusiones”. Al respecto, la senadora del MPP, Lucía Topolansky, convocó a su despacho a una delegación de Fenapes.
A pesar de esto, Slamovitz aseguró que “el diálogo con el Ejecutivo está trunco” ya que “el verso del achique fiscal de Fernando Lorenzo y Danilo Astori ya lo conocemos, porque es el mismo de Lacalle y Sanguinetti”.
En otro orden, el dirigente de Fenapes, José Olivera, informó a Montevideo Portal que a partir de ayer permanecen ocupados los liceos 2º de Salto y 1º de Tacuarembó. Esto se enmarca dentro de los paros regionales previstos para estos días. “En el marco de los paros parciales, las filiales están autorizadas para realizar las actividades que crean pertinentes. En Salto y Tacuarembó se decidió impulsar un centro de estudio particular y desarrollar una serie de acciones con la comunidad”, informó Olivera.
Según él, una profundización del conflicto era previsible, ya que no fueron recibidos por las autoridades y sus reivindicaciones son poco conocidas por el Codicen. “Las condiciones políticas y las actitudes del gobierno nacional y de las autoridades de la educación, ameritan una respuesta contundente y drástica. Además sigue estando sobre la mesa la posibilidad de una huelga general por tiempo indeterminado. Vamos a analizar el contexto día a día para ver cómo evoluciona el conflicto”, concluyó.