Resultados de 2011 fueron positivos

Locales | 23 Jun Un centenar y medio de estudiantes de cuarto y quinto año del Liceo Nº1 participan en el programa Compromiso Educativo. Por tal motivo sus padres o tutores firmaron anoche en el centro de estudios el documento que acredita ese compromiso y establece acuerdos entre el ámbito educativo y la familia. Los alumnos reciben durante ocho meses una beca de 1.000 pesos mensuales para apoyo a sus estudios y según la directora de la institución, Margarita Lawlor, los resultados obtenidos el año pasado fueron positivos y permitieron disminuir la deserción.
Compromiso Educativo es un programa llevado a cabo por la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), la Universidad de la República (UdelaR), el Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU), el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y el Ministerio de Educación y Cultura (MEC). Su objetivo es consolidar y enriquecer la matriz de programas educativos existentes, para que los jóvenes accedan, permanezcan y puedan potenciar sus trayectorias en el sistema educativo público, logrando completar la educación media superior.
En Paysandú, se se desarrolla en bachilleratos de los liceos 1 y 7 y en UTU. Los centros educativos se integran voluntariamente al programa y deben contar con la figura de un articulador pedagógico que se ocupará de coordinar el programa y será un referente adulto para los estudiantes.
La iniciativa incluye tres componentes: un acuerdo educativo, de carácter formal, según el cual cada parte (estudiantes, sus familias y el centro educativo) asumirá compromisos y responsabilidades interconectadas; una beca cuyo monto total será de 8.000 pesos distribuidos a lo largo del año lectivo; y la generación de espacios juveniles dentro de los centros educativos, donde estudiantes de Formación Docente y Universitaria desempeñarán el rol de referentes.
En diálogo con EL TELEGRAFO, la directora del Liceo Nº 1 dijo que el compromiso que asume cada estudiante se redacta en forma personalizada luego de un estudio de su situación familiar y socioeconómica. “Ese documento es como un traje a medida que firma el alumno, sus referentes adultos familiares y la Dirección del centro de estudios para el estudiante marche de acuerdo al compromiso asumido”.
En este liceo en 2011 participaron del programa un total de 95 alumnos de primer año de Bachillerato y en el presente año se amplió a alumnos de segundo año de este nivel educativo (5º de liceo).
Consultada sobre el uso que los alumnos dan al dinero de su beca, dijo que generalmente pagan fotocopias o se compran calzado o alguna campera que precisan. “A veces están mucho rato en el liceo y usan parte de ese dinero para comprar un refuerzo o una merienda. El año pasado vimos que hay chiquilines que se sienten que son iguales a los demás si andan con un refuerzo en la mano, así que hasta eso incide en la autoestima de un joven estudiante. Por otra parte, si bien el monto de la beca no es mucho vemos que para estos estudiantes es importante contar con este apoyo, es realmente una ayuda”, agregó. Una vez firmado el “Compromiso Educativo”, la institución hace un seguimiento individudal del cumplimiento del mismo y tiene la facultad de retirar la beca al alumno en caso incumplimientos.
“El año pasado tuvimos la satisfacción de ver que chiquilines que hubieran dejado de estudiar por no poder sostenerse económicamente, permanecieron en la institución. Entendemos que no alcanza con que los alumnos estén, también tienen que aprender; pero para aprender deben estar. De todas formas, este año el objetivo es mejorar el rendimiento académico”.