Paysandú, Martes 03 de Julio de 2012
Rurales | 26 Jun Los productores que presenten planes de gestión para la producción ovina recibirán un subsidio del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), con montos de hasta U$S 8.000 por proyecto. El llamado, del 15 de julio al 17 de agosto, será llevado a cabo por la Dirección General de Desarrollo Rural, y está dirigido a promover la presentación de planes para productores, tanto con experiencia en la producción ovina como para aquellos con interés en desarrollarse en ésta.
La iniciativa apunta a unos 500 productores familiares. Los interesados deben cumplir requisitos tales como promover innovaciones sostenibles de carácter estratégico que mejoren el funcionamiento de los sistemas productivos, los que a su vez deban perdurar en el tiempo. Otro de los objetivos que se persiguen es lograr mejoras en la gestión, a través de acciones colectivas por medio de las cuales poder incorporar nuevos conocimientos y prácticas a los establecimientos. Podrán acceder a los subsidios los productores cuyas explotaciones no excedan las 1.250 hectáreas Coneat 100. También se debe contar con el aval de la Mesa de Desarrollo Rural perteneciente al territorio del grupo.
Los apoyos económicos, que no serán reembolsables, cubrirán hasta el 50 por ciento de los costos de los planes de gestión presentados, los cuales a su vez deberán estar orientados a resolver los problemas productivos, de gestión y organización. Uno de los criterios de elegibilidad es que los planes deben ser presentados exclusivamente en grupos con al menos cinco integrantes. Los interesados deben a su vez estar inscriptos en el Registro de Productores Familiares. Dentro del total de subsidios se admitirá a un 30 por ciento de productores medianos o no familiares.
El director de Desarrollo Rural, José Olascoaga, sostuvo que la iniciativa de hacer una propuesta específica para la producción ovina “surge de considerar que los rubros que provienen de ella, tanto la carne como la lana, tienen buenas perspectivas para generar desarrollo en el futuro. A esto hay que sumar que Uruguay es un país donde la ovinocultura posee una tradición de fortaleza, tanto en su eslabón productivo como en el industrial. Las características que posee, al menos en el país, esta práctica hace que la misma sea ideal para el objetivo de fomentar que tiene el Estado a los pequeños y medianos productores”.
“La práctica ovina se adapta muy bien a lo que es la producción familiar. Se requiere un elevado grado de intensificación para realizarla de buena forma, y los pequeños productores poseen la dedicación y el tiempo que la oveja requiere. Por otro lado, sabemos que esos mismos pequeños productores en el pasado han tenido problemas para acceder a la tecnología necesaria, y poder superar restricciones derivadas de su escala. De esta forma se busca favorecer a quienes trabajan pequeños establecimientos agropecuarios, en forma grupal, y que puedan acceder a la citada tecnología, mejorar su productividad y sobreelevar sus índices de rentabilidad, haciendo una práctica ovina más inteligente”, indicó.
No hay un tope establecido, ni en el número de planes que se aprobarán, ni en el monto total a desembolsar por los mismos, el cual será financiado tanto por fondos provenientes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), como por el Fondo de Desarrollo Rural, el cual se creó por la Ley de Presupuesto y es administrado por la Dirección de Desarrollo Rural. “Buscamos que se presenten una buena cantidad de propuestas de calidad y poder apoyarlas. No quisiéramos dejar sin respaldo a ninguna buena propuesta”, afirmó Olascoaga.
A la hora de la elegibilidad, los antecedentes existentes de quienes se presenten pesarán, ya que se tomará en cuenta el cumplimiento de los candidatos en otro tipo de planes ministeriales anteriores. Por otro lado, lo que ocurra con esta iniciativa sentará un precedente para futuros subsidios y financiamientos estatales. La sanidad será otro tema que se abarcará ya que los proyectos deben tener dentro de sus cometidos la presentación de un plan sanitario obligatorio.
El género y la edad de quienes se presenten también será un elemento decisivo ya que se considerará positivamente en el proceso de evaluación, que se trate de jóvenes de hasta 30 años y mujeres. La inclusión en las cadenas también es un factor que se tomará en cuenta a la hora de dar los respectivos subsidios. Por ello tendrá peso a la hora de la elección, que se incluya la interacción con industrias o gremiales, tanto para asegurar la colocación del producto como para tener apoyos técnicos o de otra índole. Muchos productores que ya poseen ovinos están intentando aumentar sus rodeos, al tiempo que aquellos que en el pasado tuvieron ovejas desean incorporarlas, aunque ambos ven los precios elevados.
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