Cooperativas de viviendas

Locales | 01 Jul Además de lograr la reestructura de deudas, tras 11 años de conflicto, lo que permite incluso la cancelación de los préstamos por varias cooperativas, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam) ha logrado que se establezcan subsidios para el pago de la cuota de aquellas familias a las que se compruebe problemas económicos que no les permitan cumplir con sus compromisos, destacó a EL TELEGRAFO el secretario general de la federación, Fernando Zerboni.
Expuso el dirigente que “después de once años, a fines de 2011, se logró un acuerdo con el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma) que permite el estudio de la deuda de cada cooperativa, y de alguna manera ajustar y retirar de su deuda aquellas imputaciones que habían sido realizadas unilateralmente por el Banco Hipotecario del Uruguay (BHU), lo cual simplifica enormemente las deudas de ellas y hace que muchas de ellas cancelen”.
Acotó el dirigente que “acá en Paysandú estuvimos con los compañeros de Covisan 4 y nos decían que con 42 años de fundada, están cancelando, así como Covisan 1 y la Covisan 5 de Guichón, que son las más viejas, en tanto las demás lo que hacen es el estudio de su deuda y se genera una cuota para determinado precio de amortización, accesible a la familia”. Precisó que “para aquellas familias con dificultad económica lo que también se acordó es que tendrán un subsidio a la permanencia, para evitar tener que recurrir a medidas gremiales para no perder la vivienda por problemas económicos, siempre y cuando sean reales, por supuesto”.
Añadió que “se hace un estudio por el Ministerio de Vivienda, y si a la familia le corresponde, si está en situación económica complicada, puede recibir la amortización. Si se cubre la cuota, la paga, y si no la cubre, la diferencia la pone el Fondo Nacional de Vivienda”. Recordó asimismo que Fucvam “tiene 88 cooperativas que están reestructurando su deuda, de las cuales hay 33 que cancelarían y el resto sigue con proceso de amortización, en el que alguna va a los 10 años, y otras hasta 30 años. Es que hay cooperativas que cuando empezó esto de la reestructura de deudas, en 1999, recién empezaban a pagar. Después vinieron 11 años de conflicto, amortizaron parte de su cuota y por lo tanto tienen tiempo para continuar amortizando”.
“Pero de todas maneras no solo accede a una cuota accesible, sino que se asegura que no va a perder la vivienda por problemas económicos”, explicó el dirigente.