Policiales | 09 Jul Dos casas precarias fueron consumidas por las llamas de un voraz incendio cuando las dos familias que allí vivían compartían un asado en el barrio Curupí, a las 15 de la víspera, motivando la intervención de Bomberos y personal de la Seccional Segunda de Policía.
Se trataba de dos viviendas de madera de un solo ambiente; una ubicada al frente del terreno y la otra, de apenas 3 metros de largo por 3 de ancho, construida al fondo del predio, en un espacio cedido por el propietario de la primera de las fincas.
En la casa del frente del terreno vivían Martín Luis Campero, su esposa, y los hijos de ambos de 2 y 7 años, y en la del fondo Julio César Da Rosa Oviedo, su pareja y su hija de 2.
Las dos familias se reunieron pasado el mediodía en el espacio existente entre sus viviendas para compartir un asado pero, sin que nadie lo notara, el fuego encendido con ese fin se propagó y, en pocos instantes, las llamas devoraron las viviendas sin que sus ocupantes pudieran rescatar siquiera los documentos y el dinero. Cuando llegaron los Bomberos, sus esfuerzos fueron inútiles ya que el fuego estaba generalizado y solo se vieron limitados a extinguirlo. En la primera de las casas se quemaron una cama, un televisor y una heladera, y en la restante la cama y las escasas pertenencias que sus ocupantes poseían.
Así despojadas, las dos familias fueron alojadas en el refugio “La Heroica”.