Opinion | 08 Sep La Corte Electoral confirmó el jueves que se ha llegado a las firmas requeridas para plebiscitar el proyecto de reforma constitucional que contempla que se lleve a 16 años la edad de imputabilidad para delitos graves, como corolario de una campaña promovida por el Partido Colorado y acompañada por un sector del Partido Nacional, a la que se oponían el Frente Amplio y el Pit Cnt.
La ciudadanía, en cambio, dijo sí a la propuesta y ya los funcionarios de la Corte Electoral dieron por terminada la validación de firmas que proponen plebiscitar la baja de la edad de imputabilidad penal de 18 a 16 años, al llegar al 10% del padrón electoral nacional, cifra que establece la Constitución para impulsar consultas populares.
En total, la Corte Electoral validó 259.826 papeletas, con el objetivo de tener un margen por sobre el mínimo establecido --que es de 258.996--, según informó el ministro del organismo, Gustavo Silveira.
Además de bajar la edad de imputabilidad se propone mantener los antecedentes a los menores y crear un organismo autónomo para internar a los infractores, aspectos que ya están vigentes, previéndose que se someterá a consideración popular en las próximas elecciones nacionales, en octubre de 2014.
Para ser aprobada, la reforma constitucional que proponen el Partido Colorado y el sector nacionalista Unidad Nacional requerirá la votación del 50% más uno de los votos válidos, como establece la normativa vigente.
La ciudadanía que ha firmado ha dado un mensaje directo al gobierno, que hasta ahora ha sido reticente en reconocer que los tiempos han cambiado y que para la minoridad infractora se requieren otras respuestas, que pasan primero por la contención en dependencias adecuadas, de donde no se fuguen a las pocas horas y también un trabajo intenso en rehabilitación.
Por cierto que este mensaje debería ser recibido como tal por quienes tienen la responsabilidad de gobernar y aprobar una ley en los términos en que se han pronunciado los firmantes, pero hasta ahora los voceros de la fuerza de gobierno han reafirmado su postura negativa, por lo que habrá plebiscito.
La consulta debería hacerse en forma simultánea a las elecciones de octubre de 2014, salvo que se apruebe una norma para adelantarla, lo que sería positivo a efectos de separar las dos consultas populares y evitar la influencia de una sobre la otra. Confiamos en que en todos los casos la ciudadanía dará el mensaje definitivo a quienes se han negado a ver la realidad por motivos ideológicos y han defendido a los agresores antes que a las víctimas.