CAMPING AGRESTE

Locales | 10 Oct La vista del Uruguay en esa zona es fascinante. Se aprecian las islas apenas enfrente. El lugar invita al descanso. Apenas un área parquizada, un camino que lleva a los sanitarios o la zona de lavado de ropa. El visitante llega y tiene la carpa del estilo que solicitó armada y lista para usar. El lugar se llama “Aldea Nómada” y ha sido habilitada en casa Blanca.
Eugenio Schneider, el presidente de Fricasa que llevó adelante la idea comentó con entusiasmo el emprendimiento. “Puede ser para quien quiera pasar como hermitaño unos días; puede ser para quien quiera disfrutar de paseos, de caminatas por el pueblo, de charlas con sus habitantes. Es un lugar diferente. Eso es lo importante”.
Junto a él Soledad Araújo, una joven de 20 años que gestiona el lugar, aprueba. En la “Aldea Nómada” se pueden alquilar carpas utilizadas por poblaciones originarias de diferentes partes del mundo. El camping no tiene muchas instalaciones y es a propósito, dentro de un estilo casi agreste. Hay si una moderna batería sanitaria con duchas y un área para lavado de ropa, así como un área para asado a las brasas.
No obstante, pese a los pocos servicios dentro del camping, los visitantes tienen muchas opciones de disfrute. Meditar, pasear en botes o kayacks por el río, escribir o leer, visitar el frigorífico o un tambo, recorrer el pueblo y conversar con sus habitantes, disfrutar de la cocina de La Pulpería o en el Club Casa Blanca, pescar, cabalgar, conversar y “por supuesto amar, muchas actividades hay aquí. Pueden venir en auto, moto o en taxi. Sólo tienen que ordenar con anticipación el tipo de carpas que desean y para cuantas personas y ya está. Disfrutar, esa es la clave en la ‘Aldea Nómada’”, contó Schneider.
La “Aldea Nómada” es un área cercada y con guardias de seguridad. Y esa colina desde la que el río se ve diferente cada vez, desde el amanecer al atardecer. Vivirlo en la “Aldea Nómada” disfrutando un mate, una gaseosa o un aperitivo, será una experiencia nueva y renovada.
No hay que armar ni desarmar carpas. Cuando se llega está todo pronto. Un lugar de paz para disfrutar a pleno. Una nueva propuesta turística de Casa Blanca, una comunidad que desde hace tiempo trabaja decididamente para mostrarse, para dejarse atrapar por los visitantes. Los precios por carpa son de 200 pesos por noche para dos personas; 250 para cuatro personas por noche; y 300 pesos para seis personas por noche. A eso hay que sumar una entrada de 50 pesos por día desde seis años en adelante. En la página web de el Frigorífico Casa Blanca están los detalles y cómo reservar.