Locales | 06 Oct Sobre el mediodía de ayer arribó al puerto sanducero el ferry boat “El Platense”, lo que demandó una precisa maniobra que insumió más de una hora, a efectos del atraque en la posición y cuidado especial para asentar correctamente la plataforma de ascenso –es un buque que transporta camiones-- y quedar en la mejor posición para iniciar el retorno por sus propios medios cuando se terminen los trabajos de mantenimiento en el puerto sanducero.
“El Platense”, que opera regularmente transportando vehículos entre Juan Lacaze y La Plata, Argentina, tiene 105 metros de largo y cala casi cuatro metros, quedando atracado en el sector norte del muelle de cabotaje para ser sometido a las reparaciones programadas.
El jefe del puerto de Paysandú, Daniel Fernández, dijo a EL TELEGRAFO que “la maniobra de atraque demoró bastante más de lo previsto, y debemos tener en cuenta que normalmente no se recibe una nave de esta envergadura.
La nave tiene un calado de tres metros con ochenta, en lastre, y nos estaba indicando el armador, el superintendente de la agencia, que el transbordador tiene una capacidad de carga de treinta y cinco camiones, y estaba cargando unos doscientos camiones mensuales con sus respectivas zorras”.
Amplió el entrevistado que “cuenta con una bodega de varios pisos con ascensor para los vehículos”, y que como suele ocurrir, los armadores no revelan el eventual tipo de negocios que tienen en perspectiva en la estadía prolongada, de unos dos meses.
En cuanto a la maniobra de atraque que se practicó, expuso Fernández que se estuvo especial cuidado por cuanto los armadores “estaban preocupados por la tormenta que se avecina, la posición en la que el barco va a salir, previniendo el fondeo de las anclas para el momento de salir el barco”.
Por otro lado un elemento que también se tuvo en cuenta es la disposición apropiada de la rampa, de siete toneladas de peso, que debe quedar bien apoyada en el muro, en forma perpendicular, reveló el administrador del puerto sanducero.
paso importante
Subrayó el jerarca que esta operación “se enmarca en la complementariedad de puertos, y una vez que una nave de estas dimensiones rompe el hielo y se anima a subir a Paysandú, calando cuatro metros, ello hace que demostremos que la operación es posible y que estamos en condiciones de prestar servicios a una nave grande, y de dar una estadía prolongada”. Asimismo, “debemos tener en cuenta que en Montevideo y en Nueva Palmira hay saturación, porque no se puede dar estadía prolongada a un buque para reparaciones, por lo que estamos procurando que esos buques que están en 3,80, en 4,50 de calado, que esperen la marea adecuada, suban con baqueano y amarren y hagan sus servicios en Paysandú”.
“Creemos que esto puede animar a otros armadores, como por ejemplo los pesqueros coreanos, que son de algo menos de envergadura pero con el mismo calado, y entran en veda de pesca. Estamos intentando a medida que se saturan Montevideo y Nueva Palmira que asciendan el río Uruguay hasta Paysandú. Esos ingresos mueven el puerto, se requieren reparaciones navales y se generan otras operaciones”, explicó.
grúa oceánica
Por otro lado, reveló Fernández que se tiene agendada para la próxima semana el arribo al puerto de Paysandú de la grúa oceánica que transportó hasta el puerto de Fray Bentos nueve barcazas que serán utilizadas para el transporte de cargas por el río Uruguay.
En este sentido manifestó el jerarca de la Administración Nacional de Puertos (ANP) que “esperamos el arribo en una semana a diez días de la barcaza oceánica que está en Fray Bentos, y seguimos a la espera de arrancar fuerte en la próxima cosecha con los removidos hasta el puerto de Nueva Palmira, de acuerdo al interés manifestado por los operadores privados”.
Esta barcaza arribaría para una estadía prolongada en el puerto local, y tiene unos cien metros de largo, así como 37 metros de eslora, y no se descarta que pueda ser adaptada en el futuro para el transporte de contenedores por el río Uruguay.