Policiales | 28 Nov El edificio en donde tuvo lugar el hallazgo se estaba construyendo para la empresa de transporte de pasajeros Ersa, pero ésta quebró y fue comprado por la empresa Elycsa cuando tomó la representación de firma John Deere, tomando incluso participación en la culminación del edificio e instalándose allí entre los años 1952 y 1953. En la planta baja, con frente hacia avenida España, funcionaban las oficinas, en el primer piso la venta de repuestos y en el fondo el taller. A un costado del edificio, se i-nauguró, aproximadamente en el año 1955, la estación de combustibles que permanece activa hasta la actualidad y, posteriormente, en 1958, frente a la estación se instaló la empresa Chevrolet General Motors.
Promediando la década de los años 60, se instaló en la torre de 30 metros de altura otra sección destinada a la venta de repuestos generales, que inicialmente estaba separada del resto del edificio y contaba con entrada independiente hasta que, a fines de los años 80 y para facilidad de los clientes, se habilitó una abertura que comunicaba el sector con el dedicado a la venta exclusiva de repuestos John Deere. Elycsa cerró en el año 1976. La sociedad se dividió y quedó funcionando la empresa Labranza S.A., representante exclusivo de Chevrolet y John Deere y concesionaria de la estación de nafta. Labranza funcionó hasta el año 1999. A su cierre, Diario El TELEGRAFO S.A. adquirió el edificio, y en los últimos años solo hubo actividad en la planta baja y en el taller por el concesionario de la empresa Renault hasta su reciente traslado. La elevada torre en donde fueron hallados los restos óseos no se usaba desde 1998.