Tendrá directorio el 1º de diciembre

Locales | 25 Nov Con la confirmación del “equipo de gestión” que dirigirá los destinos de la planta textil de la Cooperativa de Trabajadores de Paylana (Cotrapay) y la próxima capitalización por medio del Fondo de Desarrollo (Fondes) comienza la cuenta regresiva para que la ex fábrica Paylana retome la producción de hilados y tejidos, de lo que estaría en condiciones el mes que viene, cuando el Fondes y el BROU culminen los trámites formales. Previendo eso, pondrán en condiciones el techo de la zona de hilandería y se planifica la presentación de muestras en ferias textiles de Brasil y Colombia.
En la sala de la gerencia de la industria, y bajo el cuadro de uno de los impulsores de la fábrica, Juan Carlos Henderson, los cooperativistas plantearon la situación de la novel empresa recordando también que “entre los años 1945 y 1950 Paysandú comenzó a darle mano de obra a lo que tenía, que era lana y cuero, y Henderson, accionista de Paylana, fue uno de los pujantes prohombres del Paysandú industrial, como por ejemplo también los Fraschini y los Olaso”, recordó Silvia Belvisi.
La situación hoy
Cuatro de los siete nuevos directivos explicaron a EL TELEGRAFO los detalles de la situación, comenzando con el “préstamo no reembolsable con rendición de cuentas”, una donación de 150.000 dólares del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) para el reacondicionamiento de parte de los techos y maquinarias de la fábrica. Mauro Valiente dijo que ese dinero gestionado por la cooperativa vendrá por medio de un convenio entre el MIEM y la Intendencia de Paysandú. Con este dinero “se van a arreglar los techos de hilandería, que están bastante deteriorados, y algunos otros arreglos en las calderas, mejorando los caños de alimentación de vapor y de agua. Ese dinero será destinado a la mejora de la estructura”.
Ya está trabajando un arquitecto contratado para evaluar las obras, cuyo informe llegará al MIEM “en los primeros días de diciembre con el aval de la Intendencia”.
La puesta a punto
Sobre quién hará el trabajo, Silvia Belvisi dijo que “se va a hacer un llamado a precios entre dos o tres empresas, porque no es fácil el trabajo”. En cuanto a las calderas, una a gas y otra a leña, dijo que “ya se le hizo la parte de tratamiento de aguas, refinación de resina y la probamos la semana pasada. Para la primera quincena de diciembre pensamos pedir la habilitación de la caldera, cuyo permiso está por vencerse”. Si bien en principio se utilizará la de leña, “ya hablamos con Ancap, porque había una deuda por gas de la empresa anterior de unos cien mil dólares, pero nos dijeron que eso ya está, y vamos a solicitar unos meses de uso de gas”. Los integrantes de la cooperativa también participan en las reuniones entre los usuarios del colector industrial y la Intendencia, y “regularizamos en la Dinama el tema de los efluentes que se van a vertir”. Recordaron que también “se comenzó a hacer hilados y tanto los análisis como los controles de calidad vienen dando bien”, aunque Miguel Sabaño aclaró que “sobre todo queremos ver si hay algún error para corregirlo, y hubo algunos casos que tuvimos que cambiar repuestos. Ayer (por el jueves) comenzó a hacerse el hilado y los compañeros entienden que la calidad es excelente, a pesar que no son materiales de primera. Y luego vendrá tejeduría y terminación”.