En Educación y Seguridad Social

Locales | 05 Dic El 70% de las personas con discapacidad residentes en la ciudad de Paysandú no concurre a ningún centro educativo o de rehabilitación y aproximadamente el 33% tampoco recibe los beneficios de la seguridad social que le corresponden. Así lo reveló una investigación realizada por el Espacio de Diálogo Social con la finalidad de incidir en las políticas públicas “porque las personas con discapacidad tienen derechos y hay que respetarlos”.
Un censo realizado en la zona Sur de la ciudad dejó en evidencia que el 23% de 748 hogares relevados tiene al menos una persona con discapacidad, lo que significa que es una situación que se registra en dos de cada diez hogares. Ese porcentaje se sitúa bastante por encima de la media nacional, que es del orden del 15%.
Posteriormente, con la finalidad de relevar la situación de otras zonas de la ciudad, fue realizado un muestreo tomando como eje a las escuelas 94, 6, 106, 88, 4, 96, 100 y 42.
Asimismo, en el interior departamental, el muestreo fue realizado en Camino de las Palmas, Esperanza, Soto, Gallinal, Cerro Chato, Quebracho y Guichón, realizándose también entrevistas a la dirección de las escuelas de esas localidades y un maestro.
La presentación de estos resultados fue realizada en el marco de las actividades de la Semana de los Derechos de la Personas con Discapacidad, que se extiende hasta el próximo lunes 10.

Una investigación realizada por el Espacio de Diálogo Social en Paysandú ciudad y localidades del interior departamental indica que existen carencias en la atención educativa y prestación de beneficios sociales a personas con discapacidad. Un dato relevante que el 70% de las personas con discapacidad residentes en nuestra ciudad no concurren a ningún centro educativo o de rehabilitación y aproximadamente el 33% tampoco recibe los beneficios de la seguridad social que le corresponden. Por otra parte, un censo realizado en la zona Sur de la ciudad dejó en evidencia que el 23% de 748 hogares relevados tiene al menos una persona con discapacidad, lo que significa que es una situación que se registra en dos de cada diez hogares. Ese porcentaje se sitúa bastante por encima de la media nacional, que es del orden del 15%.
“Nuestro objetivo es incidir en las políticas públicas porque las personas con discapacidad tienen derechos y hay que respetarlos. Esos derechos incluyen el acceso a beneficios sociales, inclusión educativa, acceso a la salud”, dijeron.
“El propósito es presentar datos científicos sobre salud, educación y vinculación con el BPS y pretendemos incidir en la política pública. Este es un diagnóstico que las instituciones y organismos pueden utilizar para incidir sobre la realidad departamental”, sostuvieron.
El Espacio de Diálogo Social fue definido por las integrantes Miryam Fuido, Rosa Barreto y asistente social Claudia Alvarez, como “un espacio de ejercicio de la ciudadanía” promovido por el Mides con la finalidad de hacer seguimiento a las políticas sociales que se instrumentan en el territorio.
CENSO Y MUESTREO
En primera instancia el Espacio de Diálogo Social realizó un censo en una zona de alta vulnerabilidad social de la ciudad de Paysandú, como es el área comprendida entre avenida Soriano, Independencia, Ledesma y el arroyo Sacra.
El censo fue realizado casa por casa con el apoyo de varias organizaciones sociales y entre los aspectos relevados estaba la integración del grupo familiar, edad, tipo de discapacidad, sexo, escolarización, distancia de centros educativos, transporte, apoyos, cobertura de salud, cobertura del BPS. Este censo involucró 748 hogares, realizándose 965 encuestas, las que fueron procesadas con apoyo del Centro Universitario de Paysandú, el Polo de Salud Comunitaria y el Laboratorio Social del Mides. Posteriormente, con la finalidad de relevar la situación de otras zonas de la ciudad, fue realizado un muestreo tomando como eje las escuelas 94, 6, 106, 88, 4, 96, 100 y 42, relevándose cuatro hogares por manzana en 10 manzanas del radio de la escuela. Asimismo, en el interior departamental, el muestreo fue realizado en Camino de las Palmas, Esperanza, Soto, Gallinal, Cerro Chato, Quebracho y Guichón.
El censo realizado en la zona Sur arrojó que el 23% de los 748 hogares relevados tiene al menos un integrante con alguna discapacidad. En total, fueron relevadas 189 personas con discapacidad en este censo, así como 35 en el muestreo realizado en las localidades antes citadas del interior departamental y 33 personas en otros barrios de Paysandú. Esas personas en situación de discapacidad se concentran en dos franjas etarias: de 4 a 15 años y de 31 a 84. La distribución por sexo es equitativa, en tanto un tercio de las personas con discapacidad identificadas en la ciudad tiene una discapacidad asociada a movilidad y un cuarto posee limitaciones mentales y de aprendizaje.
En cuanto a los cuidadores, son los padres o familiares y fundamentalmente mujeres. El 32% de los discapacitados relevados en el censo realizado en el barrio Sur y el 30% de los que residen en otras áreas de la ciudad concurren a centros educativos o de rehabilitación.
Como consecuencia, el 68% de los discapacitados de la zona Sur, el 70% de los que residen en el resto de la ciudad y el 24% de los de localidades del Interior no concurren a ningún centro educativo o de rehabilitación.
Según la investigación, la cobertura de Salud “es buena” pero no pasa lo mismo con las prestaciones del Banco de Previsión Social.
En este sentido, el 67% de los discapacitados residentes en la zona Sur de la ciudad accede a prestaciones del BPS, lo mismo que el 83% de los del Interior y el 64% de los residentes en otras zonas de la ciudad. “Aproximadamente el 33% de los discapacitados que fueron censados en la zona Sur no está recibiendo una prestación del BPS cuando tiene pleno derecho a ella”, dijeron las integrantes del Espacio de Diálogo Social.