Rurales | 09 Dic El presidente de la Sociedad de Medicina Veterinaria del Uruguay, doctor Carlos Morón, explicó que “no es un riesgo que la enfermedad llegue a Uruguay ya que no es de tipo infecto-contagiosa, sino que se transmite desde los alimentos que los animales consumen, como la harina de carne, hacia ellos”.
Si bien en teoría podría potenciar a Uruguay comercialmente en mercados en los que ambos compiten, si es que por alguna razón éstos no optaran por adquirir carne de ese país, en la práctica “Brasil tiene una enorme fuerza en comercial, y superará este hecho rápidamente”, indicó Morón. Dijo que “Brasil tiene la suficiente capacidad como para regionalizar, llegado el caso lo que ocurrió en Paraná, y declarar a los demás estados como libres de este problema, como ya lo ha hecho en el pasado con otros inconvenientes”.
Por su parte, el director de Sanidad Animal del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, Federico Fernández, dijo a El País que si bien el hecho no afecta a Uruguay de forma directa, que se haya detectado por primera vez un caso de este tipo en la región no es positivo en absoluto, ya que “cuanto más lejos se esté, mejor”.
El broker Alejandro Berruti indicó que esta situación no afectaría a Uruguay comercialmente, sino que por el contrario lo posicionaría aún más en base a su buen estatus sanitario. “Esto podría representar una barrera para Brasil en mercados de mayores exigencias como Europa, pero en aquellos que necesitan un gran volumen de carne como Rusia no significará alteraciones”, expresó.
Uno de los aspectos que más llama la atención es transcurrieron dos años entre que se produjo el caso y que se confirmó el agente infeccioso. Fernández indicó que, según información con la que cuenta, esto se debe a una demora en el envío de la muestra entre el laboratorio local y el nacional en Brasil, aunque desconoce los motivos del inconveniente. En una situación normal, el jerarca sostuvo que se demoraría solo semanas en obtener los resultados definitivos.
La razón de por qué la Organización Mundial de Salud Animal (OIE) no cambió el estatus de “riesgo insignificante de vaca loca” que posee Brasil, se debe a una serie de factores tales como que es un caso excepcional y que el país cumplió poco tiempo atrás con los requisitos necesarios para llegar a dicho estatus. Además, el jerarca indicó que “Brasil es un país muy robusto, un exportador de carne con mucha fuerza comercial y superará este hecho rápidamente”.
prion
Un laboratorio inglés detectó la presencia de prion (agente infeccioso de la enfermedad conocida como vaca loca) en la carne de un animal faenado en 2010 en el estado brasileño de Paraná. Si bien el hecho alertó a todos los actores de la cadena cárnica brasileña, no generó alarma ya que no se comprobó el desarrollo de vaca loca. “El animal no murió por la enfermedad, no manifestó síntomas”, dijo el director ejecutivo de la Asociación Brasileña de Industrias Exportadoras de Carne, Fernando Sampaio, al portal brasileño lapresse.tv.br.
Sampaio explicó que el Ministerio de Agricultura de Brasil informó del caso a la OIE y aseguró que esta institución “mantendrá a Brasil con el estatus de país con riesgo insignificante para la enfermedad de vaca loca”. Por otra parte, afirmó que “no habrá restricciones de ningún tipo para la exportación de carne brasileña”.
La noticia se reflejó en el mercado brasileño de haciendas que el viernes registró una caída en los precios. Sampaio señaló que esto se debe a que en casos ocurridos en otros países, la aparición de la enfermedad causó restricciones comerciales. “Nosotros creemos que este no es uno de estos casos. Si Brasil tuviera dificultades comerciales en el exterior debido a este tema, podrá reclamar ante organismos internacionales para revertir esa situación”, dijo.
Agregó que esto que ocurrió con un bovino en el estado de Paraná tiene precedentes en Japón y Estados Unidos en 2011. “Debido a este hecho Estados Unidos no tuvo dificultades comerciales, por lo tanto esto nos deja tranquilos. Tampoco existe hipótesis de que el agente infeccioso haya ingresado del exterior”, señaló.
El animal analizado fue faenado en 2010 y los laboratorios realizan análisis exhaustivos para descartar enfermedades como rabia y botulismo. En caso de que se hubiera confirmado la presencia de vaca loca, el país estaría aún dentro de los plazos para denunciar el hecho ante la OIE.