SU ABUELA LE RESTÓ
IMPORTANCIA: "ESTÓ TODO BIEN"

Policiales | 07 Dic Una niña de 10 años fue arrastrada por la corriente cuando se bañaba en las aguas del arroyo Sacra, cuyo cauce estaba totalmente desbordado por las intensas lluvias caídas, pasado el mediodía, motivando que se hiciera presente personal de la Seccional Primera de Policía y destacamento de Bomberos.
De acuerdo a información de carácter extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, Aldana Segovia se bañaba junto a sus hermanos y vecinos --también menores-- junto al puente existente sobre el citado arroyo en Bulevar Artigas y avenida Park Way. En un momento determinado, el agua que corría debajo del puente adquirió tanta velocidad y fuerza que provocó que Aldana y sus dos hermanos no pudieran mantenerse en pie y fueran arrastrados raudamente por la corriente en dirección Oeste. Si bien la escasa profundidad de las aguas de esa zona del arroyo no alcanzaba a sumergir totalmente los cuerpos de los niños, éstos gritaban desesperados por auxilio. Los hermanos de Aldana, de mayor complexión física, lograron vencer la fuerza del agua y alcanzar la orilla, pero la correntada continuaba arrastrando a la niña.
Un “héroe” de 15 años
Mientras desde la zona ya se solicitaba la intervención de Policía y Bomberos, Luis Cardozo, un adolescente de 15 años, vecino de Aldana, optó por arrojarse al torbellino de agua y, luego de varios minutos de esfuerzo, logró finalmente rescatarla. Al arribar la Policía y Bomberos, la niña ya estaba fuera del agua. Funcionarios de las dependencias actuantes ofrecieron a la abuela de la niña, Mirian Fagúndez, de 45 --quien se encontraba a cargo de la menor--, trasladarla al Hospital Escuela del Litoral para que fuera examinada a efectos de establecer si había sufrido alguna lesión al ser arrastrada por la corriente, pero la mujer se negó terminantemente y restó importancia a lo ocurrido.
Dijo que los niños siempre se bañan en el arroyo y “nunca pasa nada”, por lo que –según su declaración textual-- “está todo bien”.