Deportes | 13 Dic Insólitamente los neutrales de la Liga de Fútbol dieron marcha atrás. El lunes comunicaron a los representantes de los jugadores lo que se estaba dispuesto a pagar al plantel por la participación de la Copa Nacional de Selecciones, que no contemplaba siquiera el 50% de lo percibido el pasado año, y cerraron las puertas a una negociación después de las tres propuestas realizadas por los jugadores, que el martes decidieron renunciar a la selección.
Ayer apareció un acercamiento. Los teléfonos comenzaron a sonar. Los celulares del entrenador Ramón Silvera, y de Mauro Caratte, uno de los representantes del plantel a la hora de dialogar con los directivos, sonaron reiteradamente. El objetivo era uno solo: después de haber cerrado las puertas, ahora los dirigentes querían negociar.
En la mañana el acuerdo pareció estar cerca. Esta vez el tesorero de la Liga de Fútbol, Néstor Velázquez, tiró a Caratte números muy diferentes a los que habían manejado en los últimos días, los que habían obligado a los jugadores a tomar la decisión de dejar la Blanca. El volante, entonces, convocó a la mayoría de sus compañeros para la tarde, en el Parque Pasarello. No iba a haber práctica, eso estaba claro, pero sí un diálogo con respecto a esta situación, dado que Caratte daría a conocer la propuesta recibida.
Poco después se mantuvo una comunicación con los directivos, y los futbolistas se trasladaron a la Liga para dialogar con tres de los neutrales, dado que todavía existía alguna diferencia más allá de que el acuerdo alcanzado finalmente no se basa siquiera en lo ganado en la edición copera anterior.
Ya en la Liga la reunión fue dura, aunque en buenos términos. Algunos jugadores incluso se levantaron para irse, pero el presidente Nelson Manzor intentó calmar las aguas. Y, enseguida, el presidente llevó los números al pizarrón. Tras plasmar los números a la vista de todos Manzor, sorprendido, confesó que la cifra que pedían los jugadores era sensiblemente menor a lo que daban las cuentas sacadas por los dirigentes en su momento, cuando anunciaron que el plantel pedía el doble de lo del año pasado.
Esto, sin lugar a dudas, terminó por acercar a las partes. Los directivos le habían errado con los números, por lo que finalmente se llegó a un acuerdo no solo para la primera fase de la Copa, sino para la segunda instancia y también se acordó el premio por el título.
Hubo humo blanco. Hoy se firmará el acuerdo y la selección volverá a entrenar. Pero en el medio quedó ese mar de dudas en cuanto al por qué de esta situación, más allá de que Manzor explicó anoche que los directivos habían sacado mal las cuentas tras recibir las propuestas de los jugadores.
El plantel vuelve a trabajar. Silvera sigue siendo el técnico más allá de que algunos integrantes del Consejo Directivo Central hablaron con un par de técnicos y a uno de ellos se le afirmó que corría con grandes chances en caso de que Silvera renunciara, aunque los neutrales estudiaban la posibilidad de que, en caso de que el proyecto se quedara sin el actual entrenador, el técnico de la Sub 18, Raúl Maldonado, fuera quien lo continuaba.

El sábado con Bella Unión
Tras el acuerdo alcanzado por los neutrales de la Liga y los jugadores de la selección mayor, se espera jugar el partido que debía disputarse anoche ante Bella Unión. El amistoso fue fijado en forma condicional para el sábado, a las 22 y en el Estadio Artigas, por lo que podría haber una modificación en cuanto al horario del choque entre Juventud y Sud América, por la final del segundo ascenso.