Nicolás Lodeiro

Deportes | 19 Dic Está tranquilo, maduro. Como siempre, tiene los pies sobre la tierra, y esa mirada pícara más allá de la humildad de siempre. Hoy está más contento, dado que tiene esa continuidad que tanto esperaba cuando estaba en el Ajax holandés, y que hoy sí puede disfrutarla en el Botafogo.
Y, sobre todo, porque sabe que jugando, la titularidad en la selección uruguaya le hace un guiño.
En la tarde de ayer, Nicolás Lodeiro fue reconocido por la mesa de la Junta Departamental, que preside Daniel Arcieri. El volante celeste se mostró agradecido, charló de todo y hasta tuvo lágrimas de emoción cuando se recordó a su papá, Alfonso, costándole que salieran las palabras.
Después, fue tiempo de charlar un rato con EL TELEGRAFO. De su realidad en el Botafogo, de las palabras gratificantes que tuvo hace pocos días para con él el técnico de la selección, y de sus deseos futuros.
“Lo importante es jugar, sobre todo pensando en la selección. Aparte estar en Brasil me permite estar cerca de la familia, y eso es importante. Pero estoy contento de jugar cada fin de semana; además el torneo es larguísimo y jugás miércoles y domingo. La adaptación fue rápida, el técnico cuenta mucho conmigo, y más allá de que en estos últimos seis meses no salimos en el lugar que esperábamos, tuvimos la mejor campaña desde que en el ‘95 el equipo salió campeón. Y la gente se ilusiona para el año que viene. Esperemos poder seguir en este ritmo de tener minutos y continuidad”, dijo Nico justo frente a la Intendencia, mientras algún transeúnte lo miraba de reojo al pasar.
Lodeiro reconoce que “estando en Holanda sentía, si bien uno se preocupa por entrenar, que no estaba bien. Si bien el maestro contó siempre conmigo y a veces venía a la selección para tomar fuerza y volver a Holanda y jugar, veía que las posibilidades se acortaban”. Esto llevaba, lógicamente, a perder la chance de pelear por la titularidad con la Celeste. “Iba teniendo cada vez menos minutos con la selección, y eso me ponía triste. Y sabía que tenía que tomar otro rumbo”.
Por eso se la jugó: dejó el Ajax y se fue a Brasil, para vestir la del Botafogo.
“Soy joven (23), sé que fui una apuesta a futuro la que tenían en mí, y yo no quería defraudar a la selección. Por eso, más allá de pensar en mí, pensé también en eso. Por eso decidí tener continuidad para seguir creciendo, y no quedarme solo con el hecho de que estaba en Europa”, reconoció Nicolás.
Y agregó: “tengo objetivos nuevos, jugar en grandes clubes, aunque para saltar dos escalones a veces hay que bajar uno. Aunque Brasil hoy está fuerte y competitivo, Europa es el lugar al que uno quiere volver. Por eso pensé: ‘voy, trato de jugar y tener continuidad en la selección, para algún día volver a Europa’”.
No había forma de evitar hablar de la selección y del bajón futbolístico de los últimos tiempos, más allá de que el amistoso ante Polonia permitió cerrar con otro ánimo el año.
“Sucede que las selecciones van mejorando y cuando juegan ante Uruguay toman otras precauciones. Uruguay hizo tremendo Mundial, se decía que era suerte y se esperaba por la Copa América, y salimos campeones. Ahora los rivales se preparan diferentes. También los grandes equipos tienen un bajón, es bravo mantener un mismo sistema y nivel por mucho tiempo. Si bien ahora estamos en una situación complicada en la tabla, queda mucho todavía”, dijo.
Nico confía en que “hay plantel para revertir la situación y ante Polonia, que planteó buen partido, pudimos demostrarnos que podemos, que los cambios están dentro del plantel. Eso nos permitió confiar en nosotros y saber que en 2013 tenemos que ganar todos los partidos porque estas eliminatorias son las más complicadas. Si bien nos tomaron los puntos, podemos crecer y conseguir cosas”, dijo.
Nico se mostró contento por las palabras que tuvo Tabárez para con él en los últimos días, cuando entrenó en Montevideo. “Estaba sintiendo que le había acertado en ir a Brasil, pero que te lo diga el maestro, más contento y conforme me deja. Me dijo que me veía muy bien, que apostó ante Polonia y me vio bien, maduro, y eso me deja contento”.
Lodeiro estará pocos días en Paysandú, para pasar Navidad con su familia. “¿Qué le pido a Papá Noel y a los Reyes? Salud para toda la familia, que es lo principal. Que estén todos bien. Y que me vaya bien en el fútbol, que revirtamos estos últimos partidos con la selección y que vayamos al Mundial, un objetivo lindo que tenemos”, culminó.