Locales | 18 Dic El cambio en las condiciones de venta de nafta en la zona de los puentes binacionales de Paysandú, Fray Bentos y Salto, donde ahora no se pueden comprar más de 50 litros en cada operación y el descuento máximo mensual por el Imesi fue regulado, se debió a la constatación de “irregularidades” en la comercialización del combustible de frontera, según reconoció a EL TELEGRAFO el director de Ancap y de Ducsa, Juan Gómez.Si bien “todavía” no se ha confirmado si bajó el consumo de naftas en Paysandú, Salto y Fray Bentos, “algunas personas me dijeron que hay algunos ruidos” en ese sentido, dijo Gómez. En Ducsa (Distribuidora Uruguaya de Combustibles S.A., propiedad de Ancap) “tenemos números hasta el 30 de noviembre, y el decreto de rebaja del descuento del Imesi del 28% al 24% entró en vigencia el 1º de diciembre”, recordó el jerarca.
Reconoció que “a partir de la situación del cambio de moneda con Argentina, en teoría hay una mayor diferencia ahora pero aún no lo hemos terminado de afinar”, por lo que “lo hablaremos con los técnicos”.
“parar el abuso”
En cuanto a la motivación del cambio de condiciones para la venta de gasolinas, como es el máximo de cada compra y el tope de descuentos mensuales, Gómez dijo que “no es Ancap quien tiene la competencia para bajar el Imesi ni la limitación de la tarjeta, eso es del Poder Ejecutivo lo que intentamos transmitir. Pero lo que hace es tratar de parar un poco el abuso que había con el uso de la tarjeta, porque no se compraba lo que se necesitaba para el consumo de cada uno, sino que se generaba un mercado paralelo que además perjudica a otros estacioneros que no tienen la bonificación porque están a más de 20 kilómetros de los puentes”.
Gómez también afirmó que a los mismos estacioneros, si se compraban la nafta a ellos mismos con tarjeta, les quedaba más barata que lo que le pagaban a Ducsa como costo real y se compraban a sí mismos para aumentar las ganancias.
“Cuando pasaron este tipo de cosas le mandamos una nota al Ministerio de Economía y la DGI diciendo que entendíamos que había que revisar lo que estaba pasando en la frontera, y nos ofrecimos para trabajar en forma conjunta, porque tenemos mucha información, y es bueno cruzarla con la información que ellos tienen. Son todas medidas para bajar la situación de irregularidad que existe”. Pero “con esto el control mejora, no va a ocurrir algo de estas características”, explicó.
Con respecto a la venta de nafta en comercios y casas, señaló: “Alguien me ha dicho que la venta ilegal que se hace en determinados comercios, ya el precio lo subieron”, y que este problema es resorte de la Ursea (Unidad Reguladora de Servicios de Agua y Energía), aunque “esto es preocupante, porque la venta ilegal es un tema donde no se sabe qué calidad tiene ese producto porque no está controlado, y además no hay seguridad en la operación y el manejo del combustible. Es algo complicado”.
Exportan nafta
En cuanto a la exportación de excedentes de nafta, que se cotizan a precios internacionales más baratos que lo que se venden en Uruguay, admitió que “dos por tres aparecen oportunidades de venta, porque tenemos excedentes de naftas”. Consultado porqué pasa eso, dijo que “antes se daba mucho más. Teníamos una situación bien complicada en la refinería porque el mercado consumía mucho diesel, y en 2005 se vendían tres litros de gasoil por uno de nafta, lo cual era ilógico para lo que una refinería puede producir”.
Puso como ejemplo que “con un barril de petróleo, más allá de la calidad, en términos gruesos se utiliza un 40% para destilados medios, que es gasoil y queroseno, y un 25 a 30% para gasolinas. Entonces no puede haber una relación tres a uno. Pero poco a poco, con medidas como el aumento del precio, se ha ido corrigiendo y la gente se ha ido adaptando, hoy estamos con una relación de 1,7 litros de gasoil por cada litro de nafta”. Por esta razón, “en algunos momentos aún quedan algunos excedentes”.
Aumentó el consumo
Por otra parte, dijo que “si bien nos quejamos del precio del combustible, el consumo no ha caído, sigue en alza y dicen que está asociado a cómo va la economía del país. No es el caso del gasoil que tiene que ver con otros factores, pero las gasolinas en general acompañan lo que es el crecimiento de la economía. Y a pesar de esto, que sabemos que el precio tiene una carga impositiva muy alta --anda en 17 pesos por litro que se vende a 37 pesos--, el consumo no ha caído sino que aumenta todos los años; en 2005 eran 285.000 metros cúbicos y en 2011 terminamos con 570.000 metros cúbicos, solamente de naftas”.
Con respecto a la anunciada eliminación de la nafta “común” de 85 octanos, el jerarca de Ancap aseguró que “se atrasó porque va acompañado con la finalización de la desulfurizadora para el gasoil, que estará para mediados de 2013 con gasoil con bajo azufre en todo el país, no habrá dos como ahora”. En cuanto al precio, que hoy es diferente y mucho más caro el desulfurizado importado, sostuvo que “va a bajar y quedar cerca del precio menor”, aunque será un poco más caro que el actual y “de excelente calidad para lo que es la región”, y apto para los motores Euro 3. Sacando la nafta común y el gasoil con azufre, “vamos a ganar en logística y en capacidad en los tanques de combustible”, afirmó.