Rurales | 21 Dic Al cierre de un año con números positivos para los diferentes grupos de productores de la organización, la Federación Uruguaya de Grupos CREA (Fucrea), lanzó su apuesta a trabajar en el futuro inmediato en la evaluación de la sustentabilidad de los sistemas productivos.
Lógicamente que dirigentes y técnicos tienen presente que están analizando empresas que deben tener rentabilidad económica, pero no pueden apartarse de su responsabilidad. Estas mismas tierras que sus actuales beneficiarios recibieron de sus antecesores son las que se deberán cuidar para las próximas generaciones.
Con esa premisa realizan una fuerte apuesta al proyecto de “conservación del capital natural de la nueva agricultura”, recientemente aprobado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Se apuesta a acceder a más conocimiento, la difusión y disponer de nuevas herramientas para la mejora en el proceso de toma de decisiones de productores y técnicos.
En Fucrea existe conciencia de medir la sustentabilidad de los sistemas productivos, planteó el presidente de la organización, Romeo Volonté. El proyecto prevé desarrollar un seguimiento de las chacras de sus productores, a fin de evaluar la sustentabilidad física del recurso suelo y cómo impactan las distintas rotaciones de cultivos y las medidas de manejo sobre el recurso natural.
El coordinador general de Fucrea, Diego Sotelo, admitió que al cierre de 2012 se puede afirmar que fue un año muy productivo. El mejor comportamiento correspondió a los sectores agrícola/ganaderos, con un desempeño muy dinámico y con creación de nuevos grupos. Resaltó entre las actividades del año la jornada de cultivos de verano, de la que surge que los productores CREA representan más del 10% del área nacional de soja. Lo mismo sucede con el maíz.
También el ejercicio anterior del sector lechero se caracterizó por un gran desempeño, y aunque este año el comportamiento económico es totalmente distinto, ello no significa que se cerrarán ejercicios con números en rojo.
En el país hay 19 grupos CREA ganaderos, 12 lecheros, 10 agrícola-ganaderos, tres granjeros y cinco de comercialización, que integran 600 familias.