TAMBIÉN ATACARON A SU ESPOSA

Policiales | 12 Ene Un hombre de 76 años fue asesinado tras resistirse a un copamiento en el establecimiento rural “El Rinconcito” de la zona de Paso del Sauce, en Arroyo Negro, límite natural entre los departamentos de Río Negro y Paysandú. Su esposa, de 72, también fue lesionada y maniatada en el dormitorio, tras lo cual los malvivientes se llevaron 12.000 pesos.
En tanto, personal de la Seccional 13ª de Piedras Coloradas efectuó un rápido trabajo que permitió detener a varios sospechosos de ser responsables de la tragedia, que tuvo lugar en la medianoche de la víspera cuando el matrimonio se hallaba descansando en su finca de campo de Paso del Sauce, a unos 25 kilómetros al Sur de Piedras Coloradas. Socorro Ramírez (conocido como “Chiche”) y su esposa Nélida estaban radicados hacía varios años en esa zona, dedicándose a la elaboración de dulces caseros y varios tipos de mermeladas, las cuales vendían bajo el nombre “El Rinconcito”. Sus productos, que eran comercializados en la ciudad, eran muy conocidos por ser expuestos en la clásica Fiesta de la Madera que cada año se celebra en Piedras Coloradas.
Mediante información confidencial obtenida por EL TELEGRAFO se pudo saber que el crimen fue próximo a la medianoche, cuando al menos dos desconocidos ingresaron a la finca y apremiaron violentamente a la pareja. A la vez que los golpeaban, sobre todo a Ramírez, les exigían dinero que los atacantes sospechaban se hallaba en la casa, aparentemente una suma cercana a los 300.000 pesos. Tras más de dos horas de golpes y amenazas a los ancianos, los asesinos lograron hacerse de una cartera con 12.000 pesos y documentos personales --entregados por la señora-- y se dieron a la fuga.
Así, visiblemente herida y en estado de shock, la mujer logró liberarse de las cuerdas con las que había sido atada y dar aviso a su yerno de lo sucedido, el cual vive a unos 700 metros. Mientras, en la cama matrimonial su esposo --quien hacía un tiempo había sufrido amputación de piernas a causa de la diabetes-- yacía sin vida a causa de las lesiones experimentadas. En tanto, el yerno de las víctimas habría sido quien rápidamente se comunicó con la Policía y dio cuenta de lo ocurrido, ya pasadas las cinco de la mañana.
De inmediato, efectivos de la Seccional 13ª se dirigieron al establecimiento y al hacerse cargo de la situación, el comisario Ricardo Coelho dio aviso al Comando de Jefatura, haciéndose presente en el lugar personal de la Dirección de Investigaciones y de Policía Técnica. Concurrieron además el juez de Paz de Guichón y el forense, cuya pericia arrojó que la muerte de Socorro Ramírez fue producida por asfixia.
INVESTIGACIÓN E HIPÓTESIS
Si bien la Policía no se ha manifestado en cuanto a las detenciones realizadas, extraoficialmente se supo que los asesinos podrían ser de la zona o conocedores de la actividad que el matrimonio Ramírez desempeñaba.
De acuerdo a lo indicado por vecinos del lugar, se trata de un camino “por el cual pasa mucha gente que anda de cacería y de tránsito asiduo hacia La Tentación”. También se estima que los delincuentes podrían haber estado en conocimiento de un dinero que los ancianos recibirían como pago por el arrendamiento de un campo de su propiedad.
En tanto, un conocido de las víctimas expresó que éstos tendrían un sistema de comunicación interno con la casa de su hija, ubicada en un campo contiguo, y que al ingresar los malvivientes “cortaron toda forma de comunicación con el exterior”. Y agregó: “para mí que conocían todo el movimiento de la familia”.
Una rápida recorrida por la zona habría posibilitado a la Policía detener a varios sospechosos del hecho. En tanto, al cierre de esta edición ninguno de los aprehendidos había confesado su autoría o participación en el primer homicidio del año en el departamento.
“ESTAMOS TODOS CONMOCIONADOS”
Un vecino de la zona de Piedras Coloradas, que conocía al occiso y a su familia “de toda la vida”, se mostró apesadumbrado y aseguró que en la zona “estamos todos muy conmocionados”. El hombre narró con dolor lo que significaba para una comunidad tan tranquila que suceda este tipo de cosas. “Lo conozco desde hace muchos años a ‘Chiche’, un hombre vinculado al deporte en su juventud, que defendió al club de Arroyo Negro en vóleibol allá por la década del 60’. Que pasen estas cosas nos deja una sensación muy fea, sobre todo a quienes desde chicos vivimos por estos lados”.
Expresó que para llegar a la casa de Ramírez “desde Piedras (Coloradas) se debe ir por un camino de tosca. Hay una salida que va hacia Arroyo Negro que se abre en tres bocacalles. Una dobla hacia la derecha, que es donde se registró el hecho, casi a unos metros del camino que va hacia Paso de la Arena, y otra que va al pueblo. Está en una zona bastante cercana a las demás viviendas, pero es ya lugar de estancias”. Catalogó el homicidio como un “acto terrible” porque “además se trata de un hombre inválido, a quien por la diabetes le habían amputado las piernas. Es una familia muy reconocida de la zona, gente de trabajo, muy arraigados”.
“Se siente un dolor enorme y una gran impotencia, porque para que pase una cosa así la verdad que estamos ‘en el horno’. Al parecer, buscaban más plata y él no les quería dar nada, pero la señora fue quien les entregó el dinero rogando que no les hicieran más daño. ¡Qué terrible debe haber sido ver cómo mataban a su marido, a su compañero de toda la vida! La verdad no hay palabras para estas cosas”, indicó.
Supone asimismo que a la señora la deben haber “dado por muerta”. “Aparentemente se asustaron y se fueron, pero ella es la testigo principal. Habría que ver qué perfil tiene esta gente, por llamarlos ‘gente’, porque realmente qué necesidad tenían de golpear salvajemente y matar a una persona inválida. Él andaba en un carrito, tipo cochecito, en el que lo llevaban a todos lados, precisamente en la última Fiesta de la Madera se lo vio así. Estaba en silla de ruedas, pero sumamente activo mentalmente. Es una picardía enorme”, sostuvo. Repitiendo comentarios de los pobladores, este vecino expresó que “hay una conmoción enorme porque era una zona muy tranquila y de gente que vive de toda la vida en el campo, todos nos sentimos inseguros ahora. Estamos en lugares rodeados de monte, con grandes extensiones de tierra, y uno no puede creer que pasen estas cosas, sin ningún tipo de códigos. Acá parece ser ‘sálvese quien pueda’. Como uno no tiene la mentalidad de esta gente, capaz si te entran a robar no les pegas un tiro, pero ellos vienen y te matan. Entonces te ponen en una incertidumbre muy grande sobre qué hacer”.
“No sé qué pasará a partir de esto, hay mucho enojo de la gente. Habrá que ver quienes fueron pero probablemente sea gente conocida y no muy alejada de la zona. Para algunos vecinos fue alguien que sabía que ellos cobraban esa plata y habrá que ver bajo qué influencias actuaron”, puntualizó.