EXITOSO PLAN POLICIAL

Policiales | 27 Ene Dos hombres y dos mujeres confesaron su responsabilidad en una ola de 31 arrebatos cometidos en la ciudad y fueron alojados en la Cárcel Departamental, tras la rápida actuación de la Seccional Segunda y la Brigada especial conformada por el Comando a cargo del subjefe de Policía, inspector mayor Héctor Muñoz. A poco más de una semana de creada esta fuerza especial --conformada por personal de las seccionales Primera, Segunda, Tercera, Dirección de Grupos de Apoyo y Dirección de Investigaciones-- fue posible detener al menos a 15 personas, de las cuales fueron procesadas cinco.
Ante la violencia con que se llevaban a cabo los arrebatos en los últimos tiempos, el Comando de la Jefatura de Policía de Paysandú había dispuesto la conformación de una brigada que estudiara los casos ocurridos y efectuara recorridas por distintas zonas de la ciudad.
Este trabajo conjunto, que incluyó cruce de información, entrevistas con cada víctima y labor de inteligencia, permitió efectuar varios allanamientos en la zona Sur a cargo del comisario de la Seccional Segunda, Jorge Pintos, en menos de 48 horas.
En primera instancia, se logró ingresar a un “aguantadero” de la zona de Benito Chain e Independencia, donde viven ocho hombres, algunos de ellos poseedores de antecedentes penales. Allí se logró recuperar una motocicleta Yumbo Max, desprovista de plásticos. Cotejado el número de motor, se precisó que la misma estaba requerida por hurto en jurisdicción de la Seccional Primera. Del lugar fueron conducidos a la comisaría los ocho sujetos, pero finalmente uno solo quedó vinculado al hecho.
La Justicia resolvió el procesamiento sin prisión de H.J.L., de 28 años, por un delito de receptación. En tanto, no se pudo vincular a ninguno de ellos con los arrebatos
NUEVAS DETENCIONES
y CONFESIÓN
Información confidencial recabada por EL TELEGRAFO permitió saber que, desde las 4 de la mañana del sábado continuó la intensa labor que efectuar nuevos allanamientos en fincas de los barrios Sur, Tatuses Sur y La Chapita. Una primera operación permitió la detención de H.G.M., de 22 años, y su concubina M.F.P.A., de la misma edad, quienes confesaron su responsabilidad en al menos 30 arrebatos. Un segundo allanamiento derivó en la aprehensión de otra pareja: Fredy Jara Pérez, de 32 años (poseedor de antecedentes penales), y su compañera C.P.A., de 23; así como un joven de 20 años que fue nombrado por éstos.
Tras la extensa labor de interrogaciones y careos se logró la confesión de las parejas, quienes indicaron que operaban desde hacía varios meses. Se estableció que el modus operandi elegido era intercambiarse las parejas, la ropa y los cascos, así como utilizar motocicletas hurtadas a las que, además de cambiarle los plásticos, les sacaban las chapas matrículas. El rol que cada uno tomaba también era aleatorio, ya que algunas veces manejaban las mujeres y otras los hombres.
También, llamó la atención de los investigadores el hecho de que narraron poseer un “manual” (realizado por ellos mismos) de cómo arrebatar sin causarle lesiones a sus víctimas. Aunque en realidad, la gran mayoría de las víctimas (vinculadas a esta investigación) sufrieron desde erosiones hasta fracturas graves durante sus ataques.
Finalizada la instancia judicial, que demandó más de cinco horas, la jueza de Segundo Turno, Karen Ramos, resolvió el procesamiento con prisión de Fredy Jara Pérez, H.G.M., M.F.P.A., y de C.P.A por la “comisión de reiterados delitos de hurto especialmente agravados por haberse cometido por sorpresa mediante despojo de las cosas que las víctimas llevaban consigo y por la pluriparticipación en calidad de autores”.
Los confesos arrebatadores, que asolaron la ciudad durante los últimos meses, fueron trasladados a la Cárcel Departamental en un operativo conjunto de la Policía, ya que se temía la posibilidad de desmanes en las afueras de la sede judicial. Por su parte, el joven de 20 años quedó en libertad.