Nacionales | 05 Feb El comerciante de 35 años que mató a un delincuente e hirió a otro en su panadería en Montevideo, fue liberado aunque no se descarta que el juez vuelva a citarlo.
Durante la mañana de ayer se realizó la reconstrucción del hecho, donde se presentaron vecinos reclamando a la Justicia que “no trate con mano de hierro a los que trabajan y con guantes de seda a la delincuencia”.
En la tarde del sábado, tres ladrones llegaron a la panadería en una moto con cascos y camperas de jean, mientras el comercio estaba siendo atendido por uno de sus propietarios. Al ingresar al local comenzaron a amenazar al personal y a los clientes cuando el panadero logró tomar un revólver y tuvo tiempo de disparar. Uno de los disparos dio en el casco de uno de los delincuentes, de 18 años, quien alcanzó a salir del lugar, a pesar que la bala se le había alojado en la cabeza.
El otro disparo dio en el abdomen del otro ladrón, de 21 años, quien alcanzó a escapar con el tercer integrante de la banda de delincuentes. El joven herido en la cabeza cayó, pero los otros dos lo dejaron tirado y lograron escapar. Una emergencia médica trasladó al joven al Hospital Pasteur, donde falleció horas más tarde.
En tanto, el comerciante fue detenido y trasladado a la sede judicial donde declaró ante la jueza Mariana Mota, quien decidió que permaneciera a su disposición hasta realizar la reconstrucción de los hechos en el lugar, siendo puesto en libertad.