Locales | 10 Feb El cierre de las actividades del Verano Educativo en la Escuela Nº 111 fue literalmente a puro tambor. Es que el trabajo curricular que había presentado el equipo docente liderado por la directora Estela Echeveste, trató sobre “Candombe y la música de los afrodescendientes”, una propuesta que tanto el centenar de alumnos que asistieron este verano como los padres y los mismos vecinos de barrio Norte supieron disfrutar.
Motivados en que algunas de las niñas que participaron de la actividad en la escuela participan en una comparsa carnavalera, la iniciativa de la música de carnaval cayó muy bien y los escolares armaron su propia comparsa: “El toque de la 111”.
Al culminar las actividades curriculares del Verano Educativo, la idea de mostrar los avances musicales que alcanzaron los estudiantes los llevó a las calles.
Y es así que, debidamente ataviados con el apoyo de padres y vecinos, los niños de la comparsa desfilaron al ritmo de la batucada por las calles del barrio.
“Es destacable el apoyo que recibimos de la gente, no sólo los padres sino los vecinos”, dijo Echeveste a EL TELEGRAFO. Si bien fueron 100 los niños que accedieron al Verano Educativo de la Escuela 111, recordó que “en diciembre había más de 170 inscriptos, por lo que no se pudo aceptar a todos porque el cupo máximo es de 100 alumnos”.