Voladuras de techos, incluyendo el de una escuela

Locales | 03 Mar Con vientos de una intensidad no menor a los 100 kilómetros por hora, la tormenta que se abatió al amanecer del sábado sobre la zona afectó fundamentalmente un corredor de la franja noreste del departamento, donde provocó voladuras de techos en poblados y establecimientos rurales, al tiempo que derribó postes de alumbrado eléctrico y árboles, según un primer relevamiento del Centro Coordinador de Emergencias Departamental (Cecoed).
Las localidades de Piñera y Araújo fueron las más afectadas. En Piñera tres familias sufrieron voladuras de techos de sus hogares y el viento derribó los depósitos de agua, en tanto también voló el techado de la Escuela Nº 36 de Araújo.
En la jornada anterior, ya en horas de la mañana, se reunieron los integrantes del Cecoed para evaluar los daños del temporal en el departamento.
El comité, presidido interinamente por el doctor Mauro Soto, director interino de Servicios, decidió prestar ayuda a las familias damnificadas mediante la entrega de chapas y clavos, señaló a EL TELEGRAFO Carlos Monzón, integrante del comité. También se contó con la presencia de técnicos de OSE para restablecer precariamente el servicio de agua potable en Piñera.
“También en Piñera el viento derribó los dos tanques de OSE, para cuya solución nos contactamos con el ingeniero Víctor Cestau, jefe técnico de OSE, y después de la evaluación dispuso que se va a instalar un tanque y un generador, porque la zona está sin electricidad, incluyendo a Beisso, Piñera, Merinos, Morató y Tiatucurá”, explicó Monzón al regreso de la visita a Piñera, lugar al que concurrió junto con Soto y funcionarios del Área de Promoción Social de la Intendencia, que coincidió con la presencia de la alcaldesa de Guichón, Lourdes Suárez. Al término de la evaluación se resolvió auxiliar a tres familias con 27 chapas y 1.000 clavos de techo, teniendo en cuenta la voladura de techos que sufrieron en sus respectivas viviendas.
Los jerarcas también se trasladaron a Araújo, donde constataron la voladura del 60 por ciento del techo de la Escuela Nº 36, además de observar daños en galpones y casas de establecimientos rurales y caída de postes de electricidad y árboles en varios lugares de la misma zona.
Fue muy afectada asimismo el área de Santa Kilda, donde se volaron galpones y partes de viviendas del establecimiento de Diego Henderson, presidente de la Asociación de Colonos, entre otros lugares que forman parte del corredor más perjudicado por los vientos, que incluyen una franja en diagonal hacia el este del departamento.
En la ciudad las rachas de viento alcanzaron los 68 kilómetros por hora sobre las 6 de la mañana, mientras que en la zona de Guichón fueron de 95 kilómetros por hora, según los registros de las estaciones meteorológicas automáticas del Club de Pescadores en la capital del departamento y del Vivero Santa Ana en ruta 4, respectivamente.
El Cecoed a la vez ha quedado en sesión permanente a efectos de seguir de cerca la situación.
Daños en varias zonas del país
El temporal de lluvia y viento que se abatió desde la madrugada del sábado afectó a todo el país y, según un relevamiento realizado por el Sistema Nacional de Emergencias, los departamentos más afectados son Colonia y Paysandú.
En Maldonado colapsó el servicio local de 911 y de Bomberos por las solicitudes de emergencia, según advierten los policías en su radio interna. En Punta del Este la avenida Roosevelt fue cortada a la altura de la parada 16 porque el tronco de un árbol cayó sobre un motociclista que circulaba sobre esa vía mientras trabajaba como delivery. El repartidor fue llevado de inmediato al hospital local.
Otro punto de la misma avenida también está cortado. A la altura del cruce con Acuña de Figueroa un árbol cayó sobre un taxi. El tramo de la Ruta 39 que va desde San Carlos hacia Maldonado también está cortada por un tronco caído, y en la Ruta 9 a la altura del kilómetro 151 hay cables cortados y comenzó a mermar el suministro de energía en la zona. En tanto, en la capital fernandina fueron registradas voladuras de techos.
En Montevideo hay decenas de árboles caídos, y en la localidad de Tarariras, en Colonia, se volaron los techos de dos viviendas, según un primer relevamiento del Sistema Nacional de Emergencias. El organismo asegura que el causante del fenómeno es un ingreso de un frente frío desde el suroeste, asociado a una depresión atmosférica.