Deportes | 05 Mar Con el partido ante Tacuarembó sintiéndose todavía en el cuerpo, el plantel de la selección mayor del fútbol sanducero retornó a los entrenamientos, sumergiéndose de lleno en lo que será la revancha ante los rojos.
Paysandú cosechó un importante empate sin goles de visita, en el partido de ida de los cuartos de final, y apuesta todo a lograr un triunfo cuando el sábado reciba a Tacuarembó en la revancha, ya que el único objetivo de los orientados por Ramón Silvera es lograr una victoria que permita sellar el pasaporte a las semifinales de la Copa Nacional de Selecciones.
En la víspera, con algunas ausencias, el plantel sanducero se reunión en el Parque Bella Vista para realizar un corto entrenamiento sobre calle Cerrito, teniendo en cuenta que había competencia Sub 14 en el terreno de juego de los papales.
El plantel se movilizó en el aspecto físico, con pelota, y luego de que finalizara la actividad ordenada por el profesor Esteban Pinho, el técnico Ramón Silvera convocó a los jugadores para dialogar con respecto al partido jugado el domingo, pero también pensando en la revancha.
La charla, al igual que el entrenamiento, fue por demás distendida. Sentado sobre un balón, Silvera dejó en claro a los jugadores que el esfuerzo realizado en el choque de ida frente a Tacuarembó no servirá de nada si no se logra la victoria el próximo sábado, lo que fue compartido por los futbolistas, que escucharon atentamente las palabras del técnico.
De cara al choque revancha, Silvera señaló que habrá que jugar un partido por demás inteligente, teniendo en cuenta que si bien el empate sin goles fue importante, la definición de la llave obligará a Paysandú a ganar, ya que un empate sin goles lo llevará a los penales, y una igualdad por cualquier otro resultado clasificará a los rojos, dado que se tienen en cuenta los goles de visitante.
“Vamos a hacer un partido inteligente, en el que no tenemos que desesperarnos”, dijo el técnico.
Hoy será tiempo de pisar el Estadio Artigas, lo que se repetirá mañana, en tanto la idea es que el plantel quede en libertad de acción el jueves, para descansar.
El choque ante los rojos no dejó lesionados, dado que Federico Acosta tiene sobrecarga muscular en un gemelo y Ríos está golpeado, pero ninguno corre riesgo para la revancha.
Parodi retornará hoy a los entrenamientos, esperando por su evolución, en tanto Silvera podrá tener a Bicca (quien anoche entrenó junto a Caratte y Delgado en la zona del obelisco junto al preparador físico), que cumplió con su fecha de suspensión.
El que no estará es Juan Aguirre, expulsado en el choque de ida.
La Blanca ya se metió de lleno en la revancha frente a Tacuarembó. Tras una rápida evaluación de lo que fuera el compromiso, la idea es pasar la página sabiendo que la que se viene será una verdadera final.
El plantel entrenará hoy, a las 19.30, en el Estadio Artigas, donde comenzará a probar la receta que el cuerpo técnico tiene en mente para la revancha en la que, más allá de no desesperarse, deberá ganar y mostrar un juego contundente.