Deportes | 24 Mar A esta altura lo mejor es hacer borrón y cuenta nueva, pasar rápidamente la página. Sin horas para el lamento tras el empate 1 a 1 frente a Paraguay, la selección uruguaya de fútbol ya cambió el chip y se metió de lleno en la preparación para el choque del martes, cuando deba visitar a Chile por la 12ª jornada de las eliminatorias.
Pese a que la victoria se sigue negando, y que son demasiados los puntos que Uruguay sigue dejando por el camino en las eliminatorias, lo cierto es que al momento de pasar raya el equipo de Oscar Tabárez está cuarto, en zona de clasificación. Claro, podría ser muchísimo mejor.
Ayer, el plantel realizó un movimiento regenerativo tras lo que fuera el choque del viernes ante los guaraníes, y hoy se volverá a la cancha aunque en este caso para comenzar a definir la oncena que jugará ante los trasandinos.
Los suspendidos Diego Pérez y Maximiliano Pereira fueron liberados, en tanto el resto del plantel está a la orden más allá de la molestia muscular que presentó Fernando Muslera, y el golpe que acusó “Palito” Pereira.
Lo que está claro es que habrá cambios en el equipo, teniendo en cuenta que Uruguay se quedó sin dos de las piezas que presentó el viernes.
Pero no serían solo en defensa y la mitad de la cancha, dado que Matías Aguirregaray, Egidio Arévalo Ríos, Gargano y Cavani tendrían chances de ingresar entre los 11 celestes que irán en búsqueda de una victoria ante Chile, obligados tras el empate frente a Paraguay.
Tabárez saca apuntes y evalúa al rival, que también llega necesitado dado que, en lo que fue el debut oficial del argentino Jorge Sampaoli como técnico de la Roja, no fue bueno en cuanto al resultado.
Por eso, en el entrenamiento que Uruguay llevará adelante esta mañana, se espera que el técnico celeste pinte lo que será la oncena titular, para viajar a las 17.30 rumbo a Santiago.
Una vez arribada a Chile, la delegación se trasladará directamente al Estadio Nacional para realizar el reconocimiento del campo de juego.
Mañana, Tabárez dirigirá el único entrenamiento en tierras trasandinas, para ultimar detalles de cara a un choque trascendente, como lo será el del martes, a las 20.30. Uruguay tiene que ganar. Es el único objetivo posible para soñar más tranquilos, porque todavía falta.