Opinion | 25 Mar Hace algunos días informábamos que Paysandú dispone de más de 60 millones de pesos, unos tres millones de dólares, para invertir durante 2013 en distintas obras financiadas por el Fondo de Desarrollo del Interior (FDI) a las que debe sumarse la contrapartida municipal, que oscila entre el 10% y el 20% de lo que entrega el gobierno central. Y, corresponde señalarlo, pocas veces se ha utilizado con tanta exactitud la denominación de “gobierno central” si tenemos en cuenta que el procedimiento de “entrega” de los fondos es un mecanismo claramente centralista y que se contrapone con la autonomía que deberían gozar los gobiernos departamental y, por ende, sus habitantes.
Pero, soslayando lo que apuntamos precedentemente, veamos el panorama que nos interesa comentar en esta oportunidad ya que, según sabemos, se ha solicitado que los proyectos para el año 2014 sean presentados en los próximos meses, lo que nos daría un estrecho margen para elaborarlos aunque, esperamos, que ya la tarea esté encaminada.
Dice la información aludida que “Contando los proyectos --aún en ejecución algunos-- de 2011, la inversión del FDI en Paysandú alcanza los $ 217.029.651, algo más de once millones de dólares”.
Lo que le corresponde a Paysandú este año en la distribución que hace el FDI de la recaudación impositiva en el Interior, es de exactamente $ 60.114.817, los cuales serán invertidos en varios proyectos entre los que hay algunos que están en ejecución y otros que están previstos.
Hay siete proyectos vinculados a obras y dos que son para mejora de gestión o asesoramiento. Algunas vienen desde fines de 2011, como la remodelación de 18 de Julio que aún tiene para ejecutar $ 1.881.085 de los $ 31.915.250 previstos.
Mientras que para las obras de drenaje en la llamada Cuenca Tacuarembó (en la zona de Tacuarembó y Carlos Albo - Entre Ríos), que se está ejecutando desde 2012, hay un disponible de $ 46.988.611.
Para la “reubicación de luminarias y colocación de protecciones en zona aledaña al centro de Paysandú”, una obra de $ 6.878.022 más el aporte de la IDP, restan aún $ 575.826 y para la mejora en red de semáforos quedan en caja $ 266.695 del total previsto por FDI de $ 5.307.073.Otra de las obras de magnitud prevista para este año es la “gestión integral de residuos sólidos urbanos”, que incluye la compra de camiones y volquetas, entre otras inversiones menores. Para este proyecto que está en ejecución se dispuso de $ 25.273.542, con un saldo para este año de $ 2.952.892 y quedaría aún para 2014 un monto de $ 16.736.150 para invertir por el FDI, más la contraparte que corresponde a la Intendencia.
Para este ejercicio restan también otras dos partidas, pero se trata de inversiones en servicios, como es un monto de $ 256.200 para la contratación de una consultoría por las obras a realizarse en la ampliación de la avenida Roldán, y por otra parte la incorporación de un Sistema de Gestión de la Administración de la Intendencia por un total de $ 7.534.625, de los cuales este año habrá $ 6.547.125 y para 2014 se financiarán $ 987.500.
En total, ya aprobados, hay proyectos por casi 100 millones de pesos, exactamente $ 98.338.489, aunque no quiere decir que se vayan a ejecutar todos este año, sino que la Intendencia presentó proyectos por $ 38.370.316 más de lo que tenía disponible para 2013.
También hay otros dos proyectos a estudio de la dependencia de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), como son el de calentamiento solar - térmico para las piscinas del Centro Termal Almirón que fue presentado en setiembre del año pasado, y otro sobre “tránsito” de noviembre de 2012. A la vez, tenemos entendido que también se ha presentado un proyecto para la creación de una escuela de música.
Por la información que trascribimos parcialmente se aprecia en forma por demás clara que la casi totalidad de los proyectos presentados o en ejecución están destinados a obras de infraestructura ciudadana pero prácticamente no se consideran propuestas de interés educativo o cultural siendo que Paysandú tiene una valiosa tradición en ese aspecto y hay algunos aspectos donde las carencias actuales son notorias.
Es así que deberíamos establecer que algunas partidas del Fondo de Desarrollo del Interior, que no son una dádiva sino que nos corresponden por derecho, sean destinadas a esos fines. Es claro que no pretendemos negar la necesidad de las obras aludidas ni muchas otras que deben concretarse pero también es justo que se encaren otros proyectos que promuevan el enriquecimiento espiritual y la superación cultural de nuestra sociedad.
Y es del caso preguntarse por qué no impulsamos la creación de una Academia de Artes, Ciencias y Oficios de Paysandú, por qué no establecemos un Instituto Histórico Sanducero, qué esperamos para llevar la Biblioteca Municipal al Siglo XXI transformándola en un centro de acceso on line a los centenares de obras que todos deberíamos leer, por qué no procuramos que vuelvan a recibir visitantes los museos que hasta este momento han estado cerrados total o parcialmente.
Es importante, muy importante, que tengamos arterias adecuadas, muy bien iluminadas y todas las comodidades que ofrece la vida moderna pero también es necesario que podamos acceder a las artes en todas sus manifestaciones, que accedamos física o digitalmente a todo lo que se ha escrito sobre Paysandú, que podamos apreciar en plenitud la historia que nos legaron nuestros antecesores.
En definitiva, que podamos cultivarnos integralmente como corresponde a una sociedad que trabaja permanentemente en procura de su progreso y de un futuro mejor para sus hijos.