Locales | 02 Abr El Centro Araí es la primera institución existente en Paysandú para atención de personas con autismo y luego de un año de trabajo en el local de la Policlínica San Antonio se está convirtiendo en un lugar de referencia para las personas con trastorno del espectro autista.
Al frente del mismo se hallan las profesoras de Educación Especial Fabiana Pezzatti y Graciela Acosta, la maestra Silvia Fernández y la tallerista Cristina Aguilera, quienes junto a un equipo de profesionales ---psicólogo, fonoaudiólogo, psicomotricista y fisioterapeuta-- atienden a 12 niños cuyas edades van de los 16 meses a los 13 años. No obstante, el centro recibe a personas de cualquier edad que requieran de sus servicios especializados.
En el marco del Día Mundial de Concientización sobre el Autismo, que se conmemora hoy con el lema “Hablemos de Autismo”, señalaron que es importante dar visibilidad a este tema, con la finalidad de informar qué es el autismo, cómo se aborda este tipo de trastorno desde lo educativo, social y familiar con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las personas que lo padecen.
“Se trata de un trastorno que no tiene cura pero existen formas de trabajar para abordar estos casos y contribuir a la mejora de la calidad de vida. El autismo es uno de los trastornos del espectro autista, que engloba distintos trastornos con características similares y es el más conocido”, explicaron.
Los déficit más importantes de las personas que padecen este trastorno se dan en las áreas de la interacción, la comunicación y la conducta, por lo que se requiere de un abordaje muy especializado.
Explicaron que Araí es “un centro nuevo, aún en formación” que atiende a 12 niños en un salón de la Policlínica San Antonio y funciona de lunes a viernes de 8 a 12 y de 14 a 18. “Buscábamos un lugar para comenzar las actividades del centro y hemos llegado a ese lugar que nos brinda la comisión de la policlínica y nos sentimos muy cómodos allí. Se trata de personas que gestionan un lugar con cabeza abierta no sólo a los temas de salud sino también a lo educativo y tratar de brindar las mayores posibilidades y servicios a la comunidad”.
“Comenzamos a trabajar en marzo de 2012 y realizamos muchas actividades conjuntas con la policlínica. Por otra parte, el centro cuenta con un equipo transdisciplinario que aplica una metodología común de trabajo. Lo forma una psicóloga, fonoaudióloga, psicomotricista, docentes de Educación Especial, tallerista y fisioterapeuta con formación y experiencia en el área de discapacidad. Además, estamos continuamente capacitándonos”. “El año pasado realizamos capacitaciones específicas en el área con una maestra especializada y psicóloga de Montevideo que vinieron durante tres meses, participamos en el Congreso de Neuropediatría realizado en Punta del Este y cuyo tema era autismo. Este año, parte del equipo cursará una diplomatura sobre autismo en Buenos Aires, dictada por neuropediatras referentes en la región”, dijeron, y agregaron que se trata de un trastorno respecto al cual hay mucha información nueva porque continuamente está siendo estudiado.
Señalaron también que los niños que son atendidos en el centro llegan generalmente por derivación médica, a través de las escuelas a las que concurren o su familia se entera mediante el “boca a boca”.
En tanto, los métodos de trabajo especializado que allí se utilizan son el Teacch, Pecs y Floor-time. “Hay que enseñarles a aprender porque aprenden de una manera diferente, ya sea a jugar, cuestiones de autocuidado, de inserción escolar, entre otros aspectos”, dijeron.
Las actividades se solventan mediante los aportes de una campaña de “padrinos” que colaboran económicamente con lo que pueden y el año pasado se ganó un proyecto presentado al Prespuesto Participativo, por lo cual el equipo agradeció la colaboración de los vecinos que lo votaron. Actualmente han iniciado gestiones para realizar un convenio con el BPS. Próximamente funcionará los sábados un “taller de habilidades” con actividades tales como cocina, recreación y salidas. “Más allá de lo académico y terapéutico, estos niños necesitan actividades que los ayuden a ganar independencia para manejarse en la vida diaria”, agregaron.