Locales | 04 Abr Se inició en la víspera en el ex local Muró, hoy Centro de Capacitación Muró, ubicado a escasos kilómetros de Lorenzo Geyres, el curso de bachillerato agrario de la escuela Agraria de Guaviyú. Las nuevas instalaciones permitirán que el mismo sea con internado, un largo anhelo de docentes y padres de los alumnos, que se hace realidad merced a la idea del director de Desarrollo Agropecuario, Gustavo Silva.
Los mismos se realizaban tradicionalmente en la escuela agraria, pero sin la capacidad del centro de educativo de albergar a los estudiantes durante la semana, por lo que debían retirarse cada tarde y volver a la escuela al día siguiente. De esta manera, estudiantes de zonas muy alejadas como San Javier y ruta 26, podrán proseguir sus estudios sin inconvenientes, permaneciendo en la escuela entre lunes y viernes.
En la apertura de los cursos, estuvieron presentes el director de la escuela agraria en régimen de alternancia de Guaviyú, ingeniero agrónomo Marcelo Sangenís, el coordinador de la actividad docente, ingeniero agrónomo Daniel Bercianos, la jefa de internado femenino, Ana Albano, la ayudante de internado femenino, Andreina Pizzichilo y el ayudante jefe del internado masculino Rúben Castillo. Además participó el director de Desarrollo Agropecuario, Gustavo Silva.
“Por suerte logramos concretar y consolidar los cursos de bachillerato agrario en el Centro de Capacitación Muró”, manifestó a EL TELEGRAFO, el ingeniero Sangenís. “Para nosotros y sobre todo para los estudiantes es un logro muy importante que se logra gracias a el apoyo invalorable de la Intendencia de Paysandú, y en particular del director de Desarrollo Agropecuario, Gustavo Silva, quien nos apoyó en todo momento para conseguir el local y preparar toda la infraestructura para beneficio de los chicos”, enfatizó.
La gran apuesta es el funcionamiento en régimen de internado. “Brindarle alojamiento y alimentación es fundamental”, entiende Sangenís, porque “el bachillerato no lo teníamos con alojamiento y los chiquilines tenían que viajar todos los días, con todos los inconvenientes y demoras que tiene viajar todos los días desde la casa a Guaviyú y el retorno”.
El responsable del centro educativo indicó que “también es posible gracias a las autoridades de nuestra institución que estuvieron muy receptivas en la propuesta y nos apoyaron con los cargos necesarios para funcionar, quienes dependerán de la Escuela Agraria de Guaviyú”.
Si bien el Centro de Capacitación Muró está a 20 kilómetros de Guaviyú, se dispondrá de locomoción para los estudiantes, en caso de ser necesario realizar alguna práctica o trabajos de laboratorio que todavía no logre concretarse aquí”, precisó.
Las respectivas aulas, habitaciones y servicios higiénicos “lucen impecables” en la Muró. Se aprecia un arduo trabajo que fue muy bien valorado por los padres de alumnos que ayer concurrieron al inicio de los cursos, quienes se retiraron muy conformes de la forma en que se trabajará durante el año, y las comodidades que sus hijos tendrán durante el año lectivo. A lo realizado en la antigua casa, se agregan dos aulas prefabricadas que cuentan con equipos de aire acondicionado, aportadas por UTU.
Queda comenzar a dejar en condiciones las mangas y corrales, realizar algunos retoques al tambo --sólo le faltaría la máquina de ordeñar y una limpieza--, además de una limpieza del campo que posee varios chircales, lo que “iremos solucionando de a poco”, expresó.
Aproximadamente 60 estudiantes permanecerán durante la semana en la Muró, cursando 4º, 5º y 6 año.
Hay 37 anotados para el primer año de bachillerato (4º año), de los cuales 20 provienen de la zona de San Javier, Farrapos, colonia Ofir y 8 de la zona de ruta 26.
El director de la escuela puntualizó que “sin una propuesta como esta era prácticamente imposible que pudieran concurrir todos los días a la escuela de Guaviyú, y no podían acceder al bachillerato agrario”.
Para ustedes
Gustavo Silva se dirigió a los jóvenes que se aprontaban para iniciar el año lectivo, indicándoles que “se apropien de esto. Es para ustedes y las futuras generaciones”.
La Intendencia de Paysandú se hace cargo de la contratación de funcionarios no docentes para cocina y limpieza del centro educativo.
Silva dijo a EL TELEGRAFO, “que es un día de fiesta, porque se está apoyando al propio desarrollo rural y brindándoles una solución a muchos chiquilines que viajaban todos los días a Guaviyú, y a la vez dándole un empuje a la zona”.
Explicó que “antiguamente hubo un comodato de la Muró a los lucanos y después es ofertado a la Intendencia de Paysandú, quien tiene este predio de 135 hectáreas hasta el año 2015. Parte del mismo hoy (65 ha.) tiene una plantación de soja, arrendada por la Asociación de Productores de Leche de Paysandú (APLP), que “es la que sustenta este proyecto, cuyo convenio viene desde la administración pasada”, dijo.