Opinion | 13 Abr La reciente inauguración de la ampliación de los laboratorios del Polo Agroalimentario y Agroindustrial de Paysandú y el nuevo aulario del Centro Universitario de Paysandú, con la presencia de autoridades nacionales y departamentales, es sin dudas un acontecimiento de muy buena proyección para Paysandú y la región, desde que refiere a mejorar condiciones en la educación terciaria en lugares donde la capacitación a este nivel es uno de los grandes debes que tiene el país.
Las obras se enmarcan en el Plan de Obras de Mediano y Largo Plazo de la Universidad de la República. En el caso del aulario, se ha finalizado la segunda etapa de la obra, que comprende unos 1.600 metros cuadrados de construcción, en tanto se llega a los 500 metros cuadrados en el área de laboratorios construida en la Estación Experimental Dr. Mario A. Cassinoni (Eemac).
Además de mejores comodidades para estudiantes de una amplia zona del litoral oeste en la sede del Centro Universitario, sin dudas que la incorporación del laboratorio en la estación experimental conlleva un factor revulsivo para generar y potenciar la investigación científica en base a nuestra realidad, que es un aspecto nada desdeñable a la hora de potenciar la innovación tecnológica en favor de sectores productivos que son puntales dela economía del Uruguay.
En este caso, el laboratorio permitirá abordar esta investigación desde una perspectiva multidisciplinaria e integra una plataforma de alta tecnología analítica, equipada con dos espectrómetros de resonancia magnética nuclear, entre otros equipos que resultan removedores para las disponibilidades tecnológicas existentes en nuestro medio.
Sin dudas que el trabajo de este laboratorio, en apoyo de áreas como la citrícola, vitivinícola, apícola, láctea, y cárnica, entre otras, permitirá que estos sectores productivos tengan un punto de apoyo fundamental para mejorar sus respectivos perfiles en áreas clave para promover una mayor productividad, reducir vulnerabilidades y potenciar aptitudes en base a datos concretos sobre la realidad específica de sus emprendimientos.
Debe tenerse presente que frecuentemente, por las limitaciones en posibilidades de investigación en el país, las inversiones se apoyan en estudios que se han realizado fuera de fronteras, llegando por lo tanto a resultados dudosos para su aplicación a rajatabla en nuestro país.
Por lo tanto, a partir de instrumentos y recursos humanos para la investigación propia, se puede trabajar sobre realidades intransferibles y partir de elementos confiables como base de apoyo para nuestros productores.