Deportes | 19 Abr Esta noche a partir de la hora 21.15, Aguada y Defensor Sporting disputan el segundo partido de la serie final al mejor de siete encuentros, por el título de la Súper Liga Uruguaya de Básquetbol.
La serie está 1-0 a favor de Aguada, que ganó el primer partido por 91 a 81 tras disputarse un alargue por empate en 76 puntos. La diferencia final en el tanteador de ese primer partido no refleja precisamente lo que aconteció en la cancha, por cuanto la pizarra se movió en forma alternada e incluso uno de los parciales terminó con Defensor Sporting arriba por 5 puntos.
Precisamente en esos 10 minutos, el violeta no supo capitalizar su mejor momento. Llegó a sacar hasta 12 puntos de ventaja, Aguada se había quedado sin gol. Pero los fusionados marraron demasiados tiros libres, Aguada apretó las marcas, reaccionó con los triples de González. Jeremis Smith --que estuvo los 40 minutos en cancha-- y Dilligard se adueñaron nuevamente de los rebotes, descontó su equipo y ya en el cuarto final pasó al frente, por más que Defensor ganaba a falta de 1 segundo y 2 décimas por un doble.
Pero la casi infalible puntería de Leandro García Morales para los libres forzó el alargue, y entre él y Pablo Morales terminaron por darle el triunfo a los aguateros. Defensor lo tuvo, no lo aprovechó y Aguada tiene gente que en cualquier momento puede cambiar un resultado.
Hoy el aguatero querrá estirar su ventaja, y Defensor empatar la serie, en otro atrapante juego final, sin dudas.
Aguada tiene jugadores desnivelantes, como es el caso de García Morales. Un hombre que juega, encesta y hace jugar, siendo casi infalible desde la línea de tiro libres, por lo que no solo es capaz de “sacar” gente por la quinta falta, sino de embocar todo lo que tire en materia de libres.
Muro y González son temibles, al igual que Pablo Morales cuando tiran desde el perímetro. Y los dos extranjeros son más que valiosos jugando en la pintura.
Defensor Sporting tiene en estos momentos dos jugadores de gran rendimiento, el extranjero Baxley un goleador que se hace sentir, y Cabot, un base que día a día anda mejor. Citemos a Izaguirre que aporta lo suyo.
O sea los dos tienen jugadores como para protagonizar otro partidazo. “Chapatín”