Rurales | 21 Abr Una celebración sencilla pero emotiva, y que aporta mayor entusiasmo para continuar creciendo, es la que realizó este viernes en el auditorio municipal de Quebracho el grupo de colonos de Santa Kilda, al cumplir un año integrados a la Federación Uruguaya de Grupos CREA (Fucrea), y ser el único grupo de colonos en el país que se forman como tal.
Todos acompañados por su familia, también contaron con la presencia del ingeniero agrónomo Ignacio Buffa de la institución madre, la cual integran desde abril de 2012. El doctor Ramiro Díaz fue el representante de la Intendencia de Paysandú, Ariel Bordarenko por la alcaldía de Quebracho, y Diego Henderson como presidente de la Mesa Nacional de Colonos.
Milton Gamarra, en nombre de los colonos, destacó a quienes fueron aporte fundamental para la continuidad del grupo y su permanencia en el CREA, desde el ingeniero agrónomo Enrique Regazzoni, regional de la zona, “y que es un privilegio tenerlo en todas las reuniones”, pasando por Diego Henderson, “quien nos ha contactado con la gente del instituto, además de la presencia de Buffa “como asesor técnico de Fucrea”. Al agradecer al directorio del Instituto Nacional de Colonización, Gamarra lo hizo especialmente a Nilsa Pérez y Julio Cardozo, mencionando el interés del grupo de poder acceder a una fracción del campo ubicado en la colonia Tomás Paz.
Para el titular de la Mesa Nacional de Colonos, “CREA es jugar en la cancha grande, y de nosotros depende el éxito del grupo, al ser la primera vez que colonos forman en el país un grupo CREA”. Mientras que para Bordarenko la “satisfacción es multiplicada por ser vecino y colono”, Díaz recordó cuando participó por 12 años en un grupo CREA de Tambores, llamándole la atención “que este grupo celebrara el primer año”, siendo una linda forma de progresar.
Necesidad
“La necesidad de agruparse para seguir creciendo” fue apuntado por Gamarra como el principal motivo de convertirse en un grupo CREA. “El tiempo transcurrido ha hecho que esto fuera una realidad”, agregó, mencionando que “los comienzos fueron muy cautos, porque nuestra idiosincrasia hace que seamos un poco reticentes al agrupamiento, pero tuvimos la suerte de contar con productores con ideas muy encontradas”. Esto lo consideró fundamental porque “ha facilitado el diálogo y con mucho sentido común”.
El grupo se reúne todos los meses en la casa de cada productor, en donde se analizan “proyectos, dificultades y se felicitan los logros, lo que nos hace aprender de los errores, y los logros de cada productor”, dijo Gamarra. El ingeniero agrónomo José Rivero los asesora para la obtención de un predio del instituto. Días atrás presentaron un proyecto ante el INC, lo que representa “un desafío mayor del cual tenemos muchas expectativas y esperemos que no fracase”. Cinco de los integrantes del grupo aguardan la posibilidad de obtener una de las tres fracciones de Tomás Paz, inclinándose por la mayor de 795 hectáreas. “Nuestra mejor carta de presentación es que somos un grupo CREA”, sostuvo Gamarra, “lo que demuestra que no somos unos rejuntados, sino un grupo formalmente constituido”.
Ejemplo
“Esto es un ejemplo de que la herramienta de trabajo CREA es útil para cualquier tipo de productor, y que no hay limitante de escala o de rubro, ni de registros, sino para cualquier tipo de producción”, precisó a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo Ignacio Buffa.
Este proceso de formación “estuvo marcado por la fuerte voluntad de los integrantes del CREA Santa Kilda de salir adelante”, señaló.
Resta ahora “consolidarlo como grupo, con un asesor integrado y poder introducir las herramientas que les ayuden a tomar las mejores decisiones: gestión, presupuestación forrajera, integración de rubros, la integración de las nuevas generaciones a la empresa y resolver los temas de escalas”.
Como señaló Henderson en su alocución, “CREA es jugar en la cancha grande”. Y a eso apunta este grupo, pretendiendo “ser de la lanza, la punta”, para seguir adelante, tal lo que manifestó Gamarra.