Hoy quinto partido

Deportes | 29 Abr Hoy Defensor Sporting y Aguada se enfrentan por quinta vez en la serie final pactada a siete partidos en el marco de la Súper Liga Uruguaya de Básquetbol, que actualmente marca un 2-2, a partir de la hora 21.40 en el Palacio Peñarol.
Aguada tuvo el viernes la oportunidad de despegarse, de poner un 3-1 que lo aproximara a la definición, pero Defensor Sporting mostró su experiencia, sus ganas, estuvo por dos veces 12 puntos abajo en la pizarra, incluso en la última a seis minutos del final, y supo sobreponerse, igualar, forzar el alargue, ganar el partido y empatar nuevamente la serie, tan cerrada por cierto.
En los juegos anteriores cuando perdió el violeta, fue porque no supo cerrar el juego, esta vez el turno fue de Aguada, que indudablemente en el segundo tiempo anduvo mejor, sacando incluso esas diferencias a las que nos referimos antes.
Cabot, cada día más jugador, más base definido, puso los puntos que no convirtió esta vez el goleador Baxley, a quien parece que le han encontrado la vuelta para marcarlo.
Hamilton en cambio, jugó de muy buena manera y también se hizo sentir con muchos puntos y rebotes. García Morales ratificó virtudes en Aguada y con el acompañamiento de Muro y Dilligard, mantuvo a los aguateros arriba durante prácticamente el segundo tiempo. En el alargue, Cabot fue una figura más que importante, y ese cuarto juego quedó marcado con la victoria del fusionado.
UNO SACARá VENTAJAS
Y claro, hoy es el quinto juego y uno sacará ventajas poniendo un 3-2. ¿Quien será? Es muy difícil predecirlo, dar un ganador anticipado. Antes de iniciarse la serie final lo teníamos a Aguada como el equipo con mayores posibilidades de quedarse con el título.
Y dos veces se puso al frente. Ganó el primero y el tercero de los partidos. Pero también por dos veces Defensor Sporting, que ganó el segundo y el cuarto, le empató la serie. Ahora es el quinto y a esta altura los dos están con idénticas posibilidades. Jauri y Espíndola han ensayado todas las variantes posibles, a su turno marcaron la estrategia y en ocasiones debieron cambiar sobre la marcha.
Con equipos tan parejos, que se conocen ya en todos sus detalles, sin dudas que de llegar nuevamente a una definición cerrada, el más sereno, un error, o una inspiración individal, pueden marcar el resultado. Seguramente sobrarán emociones. “Chapatín”