Policiales | 03 May Un malviviente que entró a robar a una farmacia céntrica fue identificado gracias al circuito de cámaras de seguridad existentes en el lugar.
Según información extraoficial recabada por EL TELEGRAFO, pasadas las 16, un individuo --que en otra ocasión ya había hurtado mercadería pero no había sido identificado porque el comercio no contaba con cámaras de vigilancia-- ingresó a una farmacia con la intención de robar mercadería y dinero, pero gracias a que las empleadas se dieron cuenta de la maniobra, tuvo que retirarse solo con lo que había logrado extraer de las góndolas de exhibición.
El sujeto, moreno, de cabello crespo, vistiendo una camiseta gris y roja con la inscripción “Ferrari” en la parte inferior, entró a la farmacia a rostro descubierto y aparentemente desarmado.
En su trayecto por el interior del local extrajo un perfume y un desodorante --valorados en 500 pesos-- y se dirigió a la caja registradora al parecer con la intención de exigir dinero.
En ese momento, la encargada del comercio intentó dialogar con él y le preguntó qué era lo que llevaba oculto entre su ropa. Al verse sorprendido, el ladrón solo atinó a huir corriendo.
Inmediatamente fue alertada la Policía y se le exhibió la videograbación del momento del hurto.
Los efectivos actuantes notaron entonces que se trataba de un sujeto mayor de edad que vive en una pensión a unas cuadras de donde cometió el hurto, por lo que comenzaron su búsqueda a fin de aclarar el hecho.