Locales | 21 May En el Liceo 1 “Elida Heinzen” se celebró con un acto los 80 años del Liceo Nocturno en Paysandú, que fue acompañado por la dirección del centro educativo, alumnos, exalumnos, docentes y público en general.
El director del liceo, profesor Hugo Estrán, tuvo a su cargo las palabras de apertura y el anunció el ingreso de los pabellones patrios, portados por los abanderados del presente año. Tras entonarse el Himno Nacional hizo uso de la palabra el licenciado Sergio Silva, docente del Nocturno.
“Hace 80 años, gracias a ese centro de promoción de la cultura sanducera como lo era el Ateneo de Paysandú, y sobre todo gracias a su presidente, esa personalidad tan poderosa como lo fuera el doctor Eugenio Bergara, nacía lo que él llamara el Liceo Nocturno Popular, signándolo desde su primer momento con una característica que aún le honra”, expresó Silva.
A pocos días de aquel comienzo en 1933, recordó que el Diario “Los Principios” informaba que “la creación del liceo nocturno en el Ateneo fue acogida con un gran aplauso, porque ella venía a llenar una sentida necesidad del medio y a favorecer una gran cantidad de empleados y obreros que por sus ocupaciones diarias no podían cursar estudios preparatorios durante el día”.
Al iniciar su actividad, el liceo contaba con 59 estudiantes de ambos sexos. Según el proyecto de Bergara, aprobado por el Ateneo, “podían concurrir todas las personas que así lo deseen, sin distinción de ninguna especie”.
Tras ofrecer detalles acerca del funcionamiento del centro educativo en aquellos años, Silva recordó que en 1943, ya inaugurado el local del Liceo Departamental, su director, el doctor Bergara, obtuvo el traslado a ese local del Liceo Nocturno Popular, dirigido por Ángel Fortunatto. Allí funcionó durante tres años, dejando luego de existir por falta de recursos. “Pero la semilla estaba plantada, la experiencia no había sido en vano, aunque debería esperar hasta 1957 para fructificar al impulso de titanes como el doctor Demócrito Beceiro”, continuó Silva. En ese año, el Consejo de Enseñanza Secundaria creó oficialmente el Liceo Nocturno Experimental, asumiendo el doctor Beceiro su dirección.
Tras más datos sobre el funcionamiento en esa etapa, Silva agregó que en 1974 “una decisión administrativa transformó al liceo en cuarto turno del Instituto de Educación Básica y Superior de Paysandú, para recuperar su autonomía en 1989, aunque otra decisión administrativa lo transformara posteriormente en el tercer turno del Liceo 1. Sin embargo, para todos los que trabajamos en él, imbuidos de esas características de solidaridad y ser popular con que se distinguió desde un primer momento, desde hace 80 años, es y será para nosotros el Liceo Nocturno”.
Canciones y candombe
La actividad continuó con un mini recital del grupo musical integrado por Alfonsina Sanguinetti (voz), Javier Martínez (bajo), William Amarillo (percusión) y Eduardo Lemes (guitarra y voz). El cierre fue con “Lonjas de la Covacha”, que llegó con su cuerda de tamboriles, un cuerpo de baile y los típicos personajes de la mama vieja y el gramillero. Según se dijo, fue la primera vez en la historia que una agrupación lubola llega al liceo.
De esta forma, en un clima festivo, culminó el homenaje a este espacio que a través de los años ha dado oportunidades a un gran número de sanduceros, permitiéndoles culminar sus estudios secundarios.