Nacionales | 15 Jun Una mujer de 41 años mató a su hija de 8 dándole una elevada dosis de Diazepam y luego se suicidó. Ambos cuerpos fueron encontrados en el dormitorio de la vivienda en el barrio Pocitos, informó El País.
El padre de la niña alertó a la Policía a última hora del miércoles, aunque no se logró conseguir una orden judicial hasta el mediodía del jueves. Los padres de la pequeña, que estaban divorciados, debían presentarse el miércoles al mediodía ante el juzgado de Familia para resolver la situación de la tenencia de la menor. La audiencia se realizó solo en presencia del hombre. Luego volvió a llamar al domicilio de su exmujer y a su celular aunque nadie respondió, por lo que regresó a la vivienda, tocó timbre pero nadie contestó. Inmediatamente fue a realizar la denuncia a la Seccional 10, desde donde se dirigieron al edificio sin obtener respuestas. La comisaría solicitó una orden judicial para poder ingresar a la vivienda pero recién fue obtenida al mediodía del jueves. Cuando ingresaron al domicilio, se encontraron con los cuerpos sobre la cama de madre e hija.
La mujer dejó una carta con los motivos por los cuales mató a su hija y se quitó la vida, según se informó desde el Poder Judicial. Añadieron que no había signos de violencia dentro de la vivienda. A partir de las declaraciones realizadas al padre de la niña, fuentes policiales determinaron que la mujer tenía problemas psiquiátricos, era depresiva y sufría trastorno bipolar. Después del divorcio de la pareja, en el Juzgado se discutía quien se quedaría con la custodia de la menor que, mientras se resolvía la situación, vivía con su madre. Una fuente policial anunció que los fallecimientos se produjeron por un importante consumo de Diazepam, un fármaco con propiedades ansiolíticas.