Locales | 18 Jun Una de las características clave del Parque Ecológico Paysandú --que sustituirá al Zoológico Municipal-- será un plan de conservación ex situ del cardenal amarillo Gubernatrix cristata, especie autóctona incluida en el apéndice II de Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites por su sigla en inglés), que incluye todas aquellas especies que aunque no se encuentran necesariamente amenazadas de extinción en la actualidad, podrían llegar a estarlo.
Ejemplares de cardenal amarillo prácticamente no existen en otros zoológicos del Uruguay, e incluso se piensa incluirlo en el nuevo logotipo que identifique al complejo.
El zoológico ubicado en la zona suburbana de la ciudad, ocupa aproximadamente cuatro de las 27 hectáreas pertenecientes al Parque Municipal París-Londres. Este predio es atravesado de este a oeste en su sector norte por el curso bajo del arroyo Sacra, que marca el límite sur de la ciudad. Recibe, en el interior del parque, proveniente del sector urbano de la cuenca, la afluencia de la Zanja de Arana. Además d0el zoológico (no habilitado al público), en la actualidad existen una reserva de flora indígena compuesta por 162 árboles, jóvenes en su mayoría, pertenecientes a 58 especies diferentes, complementadas por otras 14 especies que crecen espontáneamente en el parque, y un invernadero utilizado para exhibición de plantas ornamentales exóticas, rodeado por tres estanques intercomunicados.
Asimismo, un parque infantil de diversiones, una cancha de fútbol y otra de básquetbol, un pequeño sector de parque recreativo arbolado con diversas especies de coníferas que contiene instalaciones para camping, un monte de eucaliptus que cubre la mayor parte de la superficie, un parque de algarrobos y espinillos de aproximadamente unas 2,5 hectáreas. Por otro lado, un puente sobre el arroyo Sacra, vehicular de concreto, un edificio central que incluye la casa del cuidador y la cocina del zoológico, dos baños públicos y una casita utilizada para reuniones y fiestas.
Dentro de la planificación paisajística y arquitectónica, que no tiene entre sus planes alterar el diseño original, se reconstruirán --remodelando el terreno e implantando la flora adecuada-- varios ambientes. Una pradera de 1,8 hectáreas, el parque de algarrobos y espinillos --una hectárea, ya existente--, el monte ribereño --tres hectáreas--, y el palmar, de 1,5 hectáreas. En los puntos de ingreso de los arroyos al parque, se ubicarán rejas con la finalidad de detener los residuos sólidos de mayor tamaño, las que deberán ser revisadas con frecuencia para remover lo acumulados. En otra zona del parque, cubiertas por eucaliptos en la actualidad, se recreará un palmar de Butia yatay, trasplantando ejemplares jóvenes que serán ubicados en el terreno según un patrón de parches distribuidos de manera aleatoria. Dentro de los parches, la localización de las palmeras también se efectuará por azar. Asimismo, dado que el zoológico dispone de una cantidad excesiva de animales domésticos, tales como palomas, cabras, gansos y gallinas se creará una granja y zoológico infantil.