Rurales | 22 Jun El Ministerio de Salud Pública (MSP) clausuró hace 20 días el frigorífico Frinavur S.A., ubicado en la ciudad de Las Piedras, al detectarse la bacteria Legionela. La sanción fue por diez días, tras lo cual se levantó el cierre, pero el viernes pasado volvió a decretarse otra clausura luego de constatarse que, pese a los tratamientos realizados en la planta, la bacteria no había desaparecido. La Legionela se puede encontrar en diversos tipos de sistemas de agua, aunque mayormente se reproduce en grandes cantidades en aguas calientes y estancadas. Quienes enferman a causa de la bacteria tienen como síntomas: fiebre, escalofríos y tos y en algunos casos dolores musculares, de cabeza, cansancio, pérdida de apetito y ocasionalmente diarrea. El lapso entre que una persona está expuesta a la bacteria y que comienza la enfermedad va de los dos a los cinco días.
Tras la detección de cuatro casos positivos en operarios en la planta, se constató la existencia de condiciones que permitían que la bacteria permaneciera allí. La directora de Epidemiología del MSP, Raquel Rosa, dijo que “a partir de ese momento se estableció un plan de acción que se encuentra en curso e incluye una serie de medidas técnicas para eliminar los reservorios donde se encontraba la bacteria”, explicó la jerarca. El viernes pasado se constató que pese a las medidas tomadas en el frigorífico, las condiciones para la existencia de la citada bacteria todavía estaban dadas, por lo que se decidió una nueva clausura hasta que éstas desaparecieran por completo, afirmó Rosa a El País.
Esta enfermedad no afecta la carne producida en la planta, ni significaría un problema sanitario para esta materia prima, por lo que se descarta que exista algún tipo de inconveniente a la hora de colocar la producción avícola, tanto en el mercado local como internacional, explicaron fuentes del sector. De todas maneras, el director de la División Industria Animal del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Héctor Lazaneo, afirmó que ahora la planta está inhabilitada para faena, ya que esto se da de forma instantánea una vez que el MSP decretó la clausura del establecimiento.
Si bien en este frigorífico, como en todos las demás, trabajan inspectores de esta repartición del MGAP controlando toda la operativa de procesamiento y manejo de la carne, dado que la enfermedad afecta a los humanos y no a los animales, no tienen cómo detectarla, explicó Lazaneo. Recordó que la planta en cuestión estaba habilitada para exportar hacia Venezuela, principal mercado para la venta de carne aviar, y reafirmó la rigurosidad de los controles que se realizan en la empresa y en todas las otras dedicadas a la exportación de alimentos.